Estimado Bibiano Morales-Castro, aprecio tu comentario y el interés por este tema tan importante. Permíteme responder desde una base bíblica y teológica. 1. Jesús fundó su Iglesia, pero no en el sentido exclusivo de una institución terrenal: En Mateo 16:18, Jesús dice: "Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella". Es crucial notar que el término "roca" (en griego petra) no se refiere exclusivamente a Pedro (petros), sino a la confesión de fe que Pedro acaba de declarar: "Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios viviente" (Mateo 16:16). La Iglesia de Cristo está fundada en Él mismo, no en un ser humano falible como Pedro (Efesios 2:20). 2. La palabra "Iglesia" no se limita a una denominación: El término ekklesia significa "asamblea" o "los llamados fuera". Esto describe a todos los creyentes nacidos de nuevo en Cristo (1 Corintios 12:13), no a una estructura religiosa específica. Jesús no habló de una iglesia institucional exclusiva, sino de una comunidad universal de fe. 3. La interpretación de Pedro como "primado" no es bíblicamente sostenible: Aunque Pedro tuvo un papel importante en la iglesia primitiva, no hay evidencia en el Nuevo Testamento de que él ejerciera autoridad suprema sobre los demás apóstoles. Pablo, por ejemplo, confrontó a Pedro públicamente en Antioquía (Gálatas 2:11-14), lo que muestra que Pedro no tenía una autoridad incuestionable. 4. La Iglesia Católica como institución se desarrolló gradualmente: Históricamente, la Iglesia Católica Romana como la conocemos hoy no existía en tiempos de los apóstoles. Fue mucho después, con la consolidación de poder político y religioso, que surgió la institución papal. Esto incluye la adopción de prácticas y doctrinas que no tienen fundamento bíblico, como la veneración de María y los santos, el purgatorio, y la transubstanciación. 5. El evangelio es lo esencial, no una denominación específica: Jesús llamó a sus seguidores a predicar el evangelio (Mateo 28:19-20), no a construir una estructura religiosa humana. La verdadera Iglesia es espiritual y se basa en aquellos que creen y siguen a Cristo como Señor y Salvador. En conclusión, afirmar que "la Iglesia Católica es la única verdadera porque Jesús fundó su iglesia en Pedro" es una interpretación sesgada y no se alinea plenamente con las Escrituras ni con la evidencia histórica. Cristo no vino a establecer una denominación, sino a reconciliar a la humanidad con Dios mediante Su sacrificio en la cruz.

Sin embargo, és muy útil tomar esta interpretacion como objetivo, ya que es más explícita