como le haces para conseguir esos precios dime cómo con q agencia lo haces o directo con la línea de crucero gracias
@matematicaazarcaosvariable6504Күн бұрын
¡Si rechaza a Jesucristo como su Salvador, un día estará en el infierno! Hebreos 9:27 dice: "Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto, el juicio." El hombre tiene una cita de morir una vez... y un día - USTED morirá. Y en el infierno alzó sus ojos, estando en tormentos. Cuando deje su cuerpo, comprenda que algo está pasando. Escuche un sonido... cada vez más y más fuerte... gritando... llorando... lamentando. Terror y temor al saber que algo que no entiende le está atrapando. "¡No puede estar pasando!" usted grita, oliendo ese horrible olor de almas quemándose. Su cara arde de calor. Llamas están ahora saliendo de sus ojos, nariz, oídos, boca - de cada apertura de su cuerpo, están saliendo llamas. Su cuerpo está crujiendo por las llamas. Su cuerpo está ahora convulsionándose del horrible dolor. "¿Por qué no muero?", grita usted. Comienza a lamentarse y a crujir sus dientes. "¿Cuándo acabará este dolor?" Pero usted sabe que nunca se acabará... Las tinieblas son aterrorizantes, le comienzan a sumergir. Siente algo moviéndose en las tinieblas... algo horrible está pasando. "¡No! ¡No! Esto no puede estarme pasando", usted grita - mientras su gusano está emergiendo. Usted comienza a maldecir el día en que nació y grita: "¡Oh Dios! ¿Por qué no me advertiste?" Pero comienza a recordar cuando el predicador le rogaba que recibiera al Señor Jesucristo como salvador. Se recuerda leyendo ese tratado evangelístico. De nuevo grita: "Dios, ¿no te importa?" Pero usted recuerda Juan 3:16: "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo Unigénito..." "Dios es un Dios de amor - Él no lo permitiría", grita usted, pero recuerda Juan 3:36: "...el que rehúsa a creer en el Hijo no verá la vida; sino que la ira de Dios está sobre él." Entonces se da cuenta de que Jesucristo tenía razón: hay un lugar llamado Infierno. ¡Y USTED ESTÁ AHÍ - PARA SIEMPRE! Pero Dios es un Dios de AMOR... ¿Por qué un DIOS DE AMOR me va a mandar al infierno? Sí, Dios es un DIOS DE AMOR - pero Dios es también un DIOS SANTO. UN DIOS SANTO demanda pago por el pecado; de otra forma, Dios no sería y no podría ser SANTO. Porque Dios es santo, el pecado DEBE ser condenado. Josué 24:19 dice: "... Él es un DIOS SANTO... No sufrirá vuestras transgresiones ni pecados." PERO, AMIGO, ¡HAY BUENAS NOTICIAS! Dios no le quiere en el Infierno. El Infierno no fue hecho para el hombre. Mateo 25:41 dice que fue "...preparado para el Diablo y sus ángeles." Por lo mismo que Dios es un DIOS DE AMOR, y Él LE AMÓ tanto, que envió a Su Hijo, Jesucristo, a esta tierra para morir una cruel muerte en una cruz, para pagar el precio que el DIOS SANTO demandaba por nuestros pecados. Romanos 5:8 dice: "Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que, siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros." Dios no manda al Infierno. Usted escoge ir al Infierno cuando rechaza al Señor Jesucristo. Cuando rechaza el amoroso regalo de Dios de vida eterna en Jesucristo... ¡USTED ESCOGE IR AL INFIERNO! El multimillonario Ted Turner, dueño de la cadena CNN, los Bravos de Atlanta y otros conglomerados, dijo en una entrevista: "Estoy esperando mi muerte y ser mandado al infierno. Es allí donde debo estar." Usted dice: ¡es un tonto! Pero, amig@, cuando usted dice "No" a Jesucristo y su pago por su pecado - ¡está diciendo lo mismo! Le está diciendo a Dios: "Yo no necesito a Jesucristo - ¡Yo pagaré por mis pecados en el infierno!" Si rechaza el regalo de vida eterna a través de Jesucristo... ¡UN DÍA USTED ESTARÁ EN EL INFIERNO!
@annavictoriasb5 күн бұрын
Deberían de quitar todas las casas inhabitadas por sus dueños. No se vale que la gente que trabaja, inclusive profesionistas, no tengan algo primordial como un techo propio. Nadie debe hacer negocio con las casas.
@wiloaleman6 күн бұрын
Como siempre Tiktok es lo más escoria de las redes sociales
@Jose-pl5iv6 күн бұрын
Para regresar si usara la visa
@tessb10056 күн бұрын
😒
@mariaceja43276 күн бұрын
Pero y de regreso 🤔😀
@ANRO.OPCIONES.INVERSIONES-w9b9 күн бұрын
No tengo nada que perder? Este tipo no sabe ni hablar...
@rodrigoplaza-fs4de9 күн бұрын
Se te nota que es un pito tu boda falla falla en el pito
@miguelangeljuarez628010 күн бұрын
Tener a Dios en tu corazón, y ayudar a los niños necesitados, eso te ayudará a tener la verdadera felicidad .🙏
@albertoguzmansiervodejesus316410 күн бұрын
Eses vacíos solo lo llena Jesús mi amigos
@ericknavarrete174511 күн бұрын
No digas mamadas meri wey
@matematicaazarcaosvariable650411 күн бұрын
El Último Suspiro: La Urgencia de Aceptar a Cristo La muerte es un tema que a menudo evitamos, pero su inminencia es una realidad que todos enfrentaremos. Muchas personas viven como si tuvieran todo el tiempo del mundo para aceptar a Jesucristo, postergando su decisión hasta que sea "más conveniente". Sin embargo, la vida es incierta y el momento en que nos encontramos con la muerte puede llegar sin previo aviso. La Escritura nos advierte sobre esta realidad: "No os engañéis; Dios no puede ser burlado; pues todo lo que el hombre sembrare, eso también segará" (Gálatas 6:7). Aquellos que rechazan el llamado de Dios no pueden esperar descansar en paz después de la muerte. Si no se ha hecho la decisión de aceptar a Cristo, la condenación es el destino que aguarda. Imaginemos a una persona que, a pesar de escuchar el mensaje del Evangelio, decide posponer su compromiso con Cristo. Un día, esa persona sale a la calle, sin saber que podría ser su último día. Al verse en una situación de peligro, ¿habrá clamado al nombre del Señor? Quizás sí, quizás no. Pero es posible que, en su último aliento, se haya dado cuenta de la gravedad de su decisión. La Biblia nos dice en Proverbios 27:1: "No te jactes del día de mañana; porque no sabes qué dará de sí el día." La oportunidad de arrepentirse y de clamar a Cristo es un regalo que se debe aprovechar mientras hay aliento. La Palabra de Dios es clara: "Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado, será salvo; mas el que no creyere, será condenado" (Marcos 16:15-16). La salvación no es solo una opción, es una necesidad urgente. Cuando alguien muere repentinamente, nos enfrentamos a la pregunta inquietante: ¿Estaba preparado? En Romanos 10:13 se nos recuerda: "Porque todo aquel que invocare el nombre del Señor, será salvo." Este versículo nos brinda esperanza, pero también subraya la importancia de la acción. La salvación es una decisión que debe tomarse con urgencia, no una posposición. La vida es un regalo, y cada día es una oportunidad para acercarse a Dios. Aquellos que han escuchado el Evangelio deben comprender que cada momento cuenta. Si hay algo que este mensaje debe transmitir es la necesidad de vivir en la certeza de nuestra salvación. Es lamentable ver a tantas almas que, aunque escucharon la verdad, eligen ignorarla. Debemos orar por aquellos que aún tienen tiempo, para que no pospongan su respuesta al llamado de Cristo. No sabemos cuándo llegará nuestro último día, pero podemos asegurarnos de que, si llega, estaremos listos para encontrarnos con nuestro Salvador. En conclusión, hoy es el día de tomar la decisión. No dejes para mañana lo que puedes hacer hoy. El tiempo es un regalo precioso, y nunca sabemos cuándo se agotará. Clama al Señor mientras aún hay tiempo, y asegúrate de que tu nombre esté escrito en el libro de la vida. "Bienaventurados de aquí en adelante los muertos que mueren en el Señor. Sí, dice el Espíritu, descansarán de sus trabajos, porque sus obras con ellos siguen" (Apocalipsis 14:13).
@matematicaazarcaosvariable650413 күн бұрын
La Reflexión sobre el Descanso en Paz: Un Llamado a los Vivos La muerte es una de las realidades más profundas y, a menudo, difíciles de enfrentar en la vida humana. Para los vivos, es fundamental reflexionar sobre su significado y las elecciones que hacemos en vida, ya que al morir, cada persona ha elegido uno de dos caminos, y no hay retorno. En las redes sociales, es común ver expresiones de condolencia como "descanse en paz", pero es vital entender que esta paz solo se aplica a quienes han vivido y muerto en Cristo Jesús. Este artículo busca ser un llamado a la reflexión para los que aún tienen la oportunidad de elegir su camino. La Elección del Camino La realidad de la vida es que todos, en algún momento, debemos enfrentarnos a la muerte. En ese momento decisivo, el destino de cada uno se manifiesta de acuerdo con las decisiones tomadas en vida. La Escritura es clara en 2 Timoteo 4:2, donde se nos instruye: "predica la palabra; insta a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende y exhorta con toda paciencia y doctrina". Este versículo enfatiza la urgencia de vivir de acuerdo a la Palabra de Dios, porque la muerte cierra la puerta a nuevas decisiones. Alguien que ha muerto sin Cristo no puede descansar en paz. En Filipenses 1:21 se dice: "Porque para mí el vivir es Cristo y el morir es ganancia". Esta afirmación resalta que solo aquellos que han vivido en la fe pueden esperar un descanso eterno. Así, es fundamental que los vivos mediten sobre su vida y su relación con Dios, recordando que "Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura" (Marcos 16:15-16). Todos tenemos la oportunidad de creer y, en consecuencia, de salvarnos o condenarnos. La Importancia del Libre Albedrío El libre albedrío es un don precioso que Dios nos ha otorgado. Cada individuo tiene la capacidad de elegir su camino, de decidir si sigue a Cristo o se aleja de Él. El Señor Jesús no desea la muerte del que muere, sino del que se arrepiente. Es por eso que debemos hablar de Su Palabra "a tiempo y fuera de tiempo", para que más personas vengan al conocimiento de la verdad, comprendiendo que, tras la muerte, ya no hay esperanza de cambio. Es mientras hay vida que cada uno debe tomar la decisión de ser obediente a la Palabra de Dios. En Romanos 10:9-10 se establece que "si confiesas con tu boca que Jesús es el Señor y crees en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo". Este es un llamado claro a la acción, a la fe y a la proclamación del evangelio, que ofrece una esperanza de salvación. La Lamentable Realidad de la Condenación Es lamentable que no todos los que mueren lo hagan en Dios. Esta realidad nos lleva a reflexionar sobre la condición del alma humana. La Escritura nos enseña que el reino de los cielos tiene reglas que deben ser cumplidas. Así como una empresa tiene reglamentos para sus empleados, el reino de Dios también tiene sus principios. El evangelio de Jesucristo es el único camino que lleva a la salvación. En Lucas 13:23-24, se nos advierte que "son pocos los que se salvan", lo que debería hacernos meditar sobre nuestras acciones y decisiones. "Entrad por la estrecha puerta; porque ancha es la puerta y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella". Este pasaje es un claro recordatorio de la difícil elección que enfrentamos. La Promesa de Paz para los Creyentes La paz que ofrece Cristo es distinta a la que el mundo proporciona. En Juan 14:27, Jesús dice: "La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como la da el mundo. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo". Esta paz es el resultado de vivir en obediencia a Dios y de tener una relación personal con Él. Para quienes mueren en el Señor, hay una promesa de descanso: "Bienaventurados de aquí en adelante los muertos que mueren en el Señor. Sí, dice el Espíritu, descansarán de sus trabajos, porque sus obras con ellos siguen" (Apocalipsis 14:13). Un Llamado a la Acción para los Vivos Este artículo es, ante todo, un llamado a los vivos. La muerte no debe ser un tema tabú, sino una oportunidad para reflexionar sobre nuestras vidas y elecciones. La pregunta es clara: ¿Qué camino has elegido? ¿Estás viviendo de acuerdo con la verdad de Dios? La esperanza está en que, mientras haya vida, siempre hay un camino hacia la redención. Los vivos deben buscar a Cristo, compartir su mensaje y vivir de acuerdo a su voluntad. El tiempo es ahora. No esperes a que sea demasiado tarde. Conclusión El descanso en paz es una realidad que solo se aplica a aquellos que han hecho de Cristo su Señor y Salvador. La muerte es un final inevitable, pero también es un nuevo comienzo para quienes han vivido en Su gracia. Insto a todos los vivos a meditar sobre estas verdades, a abrazar la oportunidad de la salvación y a vivir una vida que glorifique a Dios. La decisión es nuestra, y el tiempo para actuar es hoy.
@matematicaazarcaosvariable650414 күн бұрын
La Elección de los Caminos: Reflexiones sobre la Vida, la Muerte y el Descanso en Paz La muerte es un tema que, sin duda, genera profundas reflexiones en todos nosotros. Más allá de la tristeza y el duelo, nos invita a considerar qué significa realmente vivir y, especialmente, cómo nuestros actos y decisiones influyen en nuestro destino eterno. En la actualidad, especialmente a través de las redes sociales, muchos comparten sus condolencias y expresiones de tristeza ante la pérdida de un ser querido, a menudo acompañadas de la frase "descanse en paz". Sin embargo, esta expresión, aunque llena de buenas intenciones, puede ser engañosa si no se considera el contexto espiritual en el que nos encontramos. La Realidad de la Muerte La Escritura es clara en que, al morir, cada persona ha elegido uno de dos caminos: el de la salvación a través de Cristo o el de la condenación. No hay retorno una vez que se cruza el umbral de la muerte. El apóstol Pablo, en Filipenses 1:21, dice: "Porque para mí el vivir es Cristo y el morir es ganancia". Esta afirmación revela una profunda verdad: aquellos que han vivido en Cristo tienen la promesa de la vida eterna. Por el contrario, aquellos que han rechazado esta verdad se enfrentan a un destino que, lamentablemente, no ofrece esperanza de descanso. La urgencia de compartir el mensaje del Evangelio es esencial. En 2 Timoteo 4:2, se nos instruye a "predicar la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina". Esto implica que, mientras haya vida, siempre hay una oportunidad de arrepentimiento y de salvación. Sin embargo, una vez que la vida se termina, no hay más decisiones que tomar. La Decisión Durante la Vida Es fundamental comprender que el libre albedrío nos permite elegir nuestro camino mientras estamos vivos. Romanos 10:9-10 nos enseña que "si confesares con tu boca que Jesús es el Señor, y creyeres en tu corazón que Dios le levantó de los muertos, serás salvo". Esta elección no es solo un acto de fe; es una declaración de intención y de compromiso con la verdad de Dios. El llamado a la salvación es universal, y todos estamos invitados a entrar por la puerta estrecha que conduce a la vida (Lucas 13:23-24). Sin embargo, la Escritura también nos advierte que "son pocos los que la hallan". Esto subraya la importancia de vivir de manera que nuestras decisiones reflejen nuestra fe en Cristo y nuestro deseo de seguir Su camino. El Descanso en Paz La noción de "descansar en paz" se encuentra íntimamente ligada a nuestra relación con Cristo. Apocalipsis 14:13 declara: "Bienaventurados de aquí en adelante los muertos que mueren en el Señor". Este descanso no es un estado de inactividad, sino una paz que proviene de haber vivido conforme a la voluntad de Dios. Es un descanso que trasciende el dolor de la muerte y abre las puertas a la gloria eterna. Por otro lado, es doloroso reconocer que no todos los que mueren lo hacen en el Señor. La tristeza que acompaña a la pérdida puede intensificarse al considerar la eternidad de aquellos que no han elegido el camino de la salvación. En este contexto, el llamado a predicar y vivir el Evangelio se hace aún más urgente. La esperanza de vida eterna a través de Cristo debe ser proclamada con fervor, no solo por la salvación de los vivos, sino también para la memoria de los que han partido. La Responsabilidad de los Vivos Las redes sociales son una plataforma poderosa para compartir mensajes de esperanza y fe. En momentos de duelo, es importante reflexionar sobre cómo nuestras palabras y acciones pueden influir en la vida de otros. Predicar el Evangelio no es solo un deber; es un regalo que podemos ofrecer a aquellos que aún tienen la oportunidad de tomar una decisión por Cristo. La paz que Jesús ofrece es diferente a la que el mundo puede proporcionar. En Juan 14:27, Él dice: "La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como la da el mundo. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo". Esta paz es un ancla en tiempos de tristeza y confusión, y es el resultado de una vida en obediencia y comunión con Dios. Conclusión La muerte es un recordatorio de que nuestras decisiones tienen consecuencias eternas. Vivir en Cristo no solo es un acto de fe, sino una forma de prepararnos para el inevitable momento que todos enfrentaremos. Aquellos que eligen seguir a Cristo pueden confiar en que, al final de sus días, encontrarán descanso en paz. Es imperativo que, mientras haya vida, tomemos en serio la responsabilidad de compartir el mensaje de salvación. Que nuestras vidas sean un reflejo de la esperanza y la paz que solo Cristo puede ofrecer, y que, al recordar a los que han partido, también recordemos la urgencia de vivir y predicar la verdad que transforma. En última instancia, la paz que se busca no se encuentra en las palabras que se dicen tras una pérdida, sino en la vida que se vive antes de que llegue ese momento.
@matematicaazarcaosvariable650415 күн бұрын
La mentira y el engaño te llevarán al infierno “Todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre” (Apocalipsis 21:8). Hoy en día, en nuestra sociedad, la mentira abunda a montones y a la gente le fascina mentir constantemente, no sabiendo que esto nos traerá consecuencias eternas. Tenemos que aprender a vigilar lo que hablamos y prometemos a diario. Es mejor decir sí o no, pero no decir a nadie mentiras. Y si mentimos, recordemos pedirle perdón al Señor. Recuerde que tenemos un abogado, y él es fiel y justo para perdonarnos, pero esto no significa que voy a utilizar la mentira constantemente como un medio de escape para obtener un beneficio personal. Recuerde que necesitamos arrepentirnos. Mentimos a causa de nuestra naturaleza pecaminosa; mira lo que dice la Biblia al respecto: “Se apartaron los impíos desde la matriz; se descarriaron hablando mentira desde que nacieron” (Salmos 58:3). La mentira es parte de nuestra naturaleza; somos pecadores. Para los impíos es un placer mentir, y entre más mentiras dicen, más se gozan en su maldad. No les interesa poner freno a su lengua, ni mucho menos dejar de mentir. Recuerde que en el evangelio, la justicia de Dios se revela por fe y para fe, de principio a fin: “más el justo vivirá por la fe”. Sin embargo, muchos blasfemos solo les interesa utilizar la mentira para su beneficio. Indiscriminadamente, no solo se complacen mintiendo, sino robando. ¿Por qué? Porque a ellos solo les interesa lograr su objetivo a cualquier precio; se empeñan en seguir mintiendo y no prestan atención a la palabra escrita. Pero ya lo había dicho Jesús: “por más que oigan, no entenderán; por más que vean, no verán, porque su entendimiento está cegado”. Veamos lo que dice la Biblia: “El justo aborrece la palabra de mentira; más el impío se hace odioso e infame” (Proverbios 13:5). Aquí, la justicia consiste en obedecer a Dios. Cuanto más justicia hay, menos mentira habrá. Pero la impiedad aumenta la falsedad. “Ciertamente mi pueblo son hijos que no mienten” (Isaías 63:8). Dios quiere un pueblo santo, puro, dueño de sí mismo, que ame la verdad y que se aparte de todo aquello sospechoso que está ocasionando daño a la gente y enviándola al infierno. Recuerde que el que encubre pecados no prosperará, pero el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia. La mentira abunda porque el pueblo del Señor es poco. El verdadero hijo de Dios ama la verdad y se aparta de toda mentira y engaño. “No mintáis los unos a los otros, habiéndonos despojado del viejo hombre con sus hechos” (Colosenses 3:9). Solo los pecadores mienten. El que abandona su vieja manera de vivir también abandona la mentira, el engaño y la estafa vendiendo himo. Veamos: “El testigo falso no quedará sin castigo, y el que habla mentiras no escapará” (Proverbios 19:5). Dios ni siquiera puede aceptar las mentiras que se dicen en broma, porque esa es parte de nuestra vieja naturaleza. Veamos: “Como el que enloquece y echa llamas, saetas y muerte, tal es el hombre que engaña a su amigo y dice: Ciertamente lo hice en broma” (Proverbios 26:18-19). Entonces debes prometerle a Dios que dejarás de mentir, y las veces que lo hagas, pídele perdón. Mejora en la próxima y no lo vuelvas a hacer. El Espíritu Santo te renovará día a día hasta llegar a la estatura de Cristo Jesús. ¡Aleluya! Día a día Dios te ayudará a renovar la vieja naturaleza por la nueva naturaleza, creciendo de gloria en gloria. No te des por vencido; continúa. Recuerda que tenemos un abogado para todos aquellos que hemos nacido de nuevo; él siempre estará listo para ayudarte. Veamos: “Mis labios no hablarán iniquidad, ni mi lengua pronunciará engaño” (Job 27:4). Clama a Dios por su ayuda: “Libra mi alma, oh Jehová, del labio mentiroso y de la lengua fraudulenta” (Salmos 120:2). Tenemos que reconocer que Dios ayuda a los suyos por un cambio grandísimo. Veamos: “Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne. Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos y los pongáis por obra” (Ezequiel 36:26-27). Puesto que la naturaleza vieja se inclina automáticamente a la mentira, Dios nos da una naturaleza nueva. ¡Aleluya! Y esta naturaleza ahora desea hacer lo bueno, nunca lo malo. “Porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad” (Filipenses 2:13). Finalmente, no olvides que todos los mentirosos serán condenados en el lago de fuego y azufre. Entrégate a Jesús y evita este fin horroroso. Te ruego que arregles cuentas con Dios antes de que pierdas la oportunidad de entrar al cielo. Abandona tus pecados y busca a Dios de todo corazón. Lee la Biblia diariamente y obedécela. Busca una iglesia bíblica compuesta de verdaderos creyentes que amen la verdad íntegra de la palabra de Dios, que sean humildes y obedientes a los mandamientos del Señor. Si no conoces ninguna iglesia con estas características, ora diariamente; el Espíritu Santo te ayudará al cambio. Recuerda que la iglesia eres tú. Inicia hoy mismo una relación con tu Padre celestial desde tu aposento. Allí, en tu recámara, di: “Señor Jesús, yo reconozco que soy un pecador, que mi pecado me separa de ti, que mi vida no tiene sentido, que he mentido constantemente y que siento que mi alma se muere”. Hoy, Señor, vengo delante de tu presencia y me arrepiento de todos mis pecados. Te pido perdón por todo lo malo que he hecho. Quiero que me des una nueva naturaleza y que me ayudes día a día a apartarme del mal y buscar el bien. Que tu Espíritu Santo me ilumine siempre y me dirija cada vez más hacia la verdad. Háblame, Señor; te obedeceré a través de tu palabra, y mi hogar, mis hijos, mi esposa, mi familia serán mi iglesia donde congregarme. Ayúdame, Señor. ¡Gracias!
@martinvictorianorojocastro694615 күн бұрын
Tienes razón alex
@manjram36317 күн бұрын
En NJ habia raiteros que cobraban doble tarifa, y estaban con visa de turista uno era de Oaxaca. Mexico, ya fue deportado. Otro tipo que trabaja oara Shore Taxi en Long Branch, NJ tambien lo reporte a la base de taxis por ratero, tambien mexicano, pero los paquistanos y haitianos no se quedan atras estafadores.
@edudelacruz365217 күн бұрын
Vos no invertias en la bolsa que haces haciendo esta webada del bot
@luistorres-ix2eo18 күн бұрын
Pero tiene cara de pobre
@matematicaazarcaosvariable650418 күн бұрын
La Realidad del Descanso Eterno: Una Reflexión sobre la Vida, la Muerte y el Camino de la Salvación La vida es un camino lleno de decisiones, y cada una de ellas nos acerca o nos aleja de nuestro destino final. Cuando se trata de la muerte, la realidad se torna ineludible: cada persona elige uno de dos caminos, y al cruzar ese umbral, no hay retorno. Esta verdad nos invita a reflexionar sobre lo que significa realmente descansar en paz y quiénes son los que realmente pueden acceder a ese estado. En las redes sociales, es común ver mensajes de "descanse en paz" cuando alguien fallece. Sin embargo, es vital recordar que el verdadero descanso eterno solo se aplica a aquellos que han vivido y muerto en Cristo Jesús. La Escritura nos dice en Filipenses 1:21: “Porque para mí el vivir es Cristo y el morir es ganancia”. Esta declaración encapsula la esencia de la fe cristiana: vivir en conexión con Dios y, al final, recibir la recompensa de esa relación. El apóstol Pablo, en su carta a los romanos, nos exhorta a confesar con nuestra boca que Jesús es el Señor y a creer en nuestros corazones que Dios le levantó de los muertos para ser salvos (Romanos 10:9-10). Esta invitación no es solo una formalidad; es una llamada a tomar una decisión consciente sobre nuestra vida espiritual mientras aún tenemos aliento. Es el libre albedrío que Dios nos ha otorgado, la capacidad de elegir entre el camino de la vida o el de la perdición. La urgencia de esta decisión se hace más evidente cuando consideramos la enseñanza de Marcos 16:15-16: “Id por todo el mundo, y predicad el evangelio a toda criatura. El que creyere y fuere bautizado será salvo; más el que no creyere será condenado”. Estas palabras resaltan la importancia de la evangelización y el testimonio, ya que cada persona tiene la oportunidad de conocer la verdad y decidir su destino. Sin embargo, es lamentable constatar que no todos los que mueren en este mundo lo hacen en la fe. Muchos dejan este plano terrenal sin haber tomado la decisión de aceptar a Cristo, y es aquí donde la verdadera tristeza se asienta. Aquellos que mueren sin Cristo no descansan en paz; su destino es la separación eterna de Dios. Así como una empresa tiene reglamentos que cumplir para ser aceptada en ella, el reino de los cielos también exige que sigamos un camino específico: el evangelio de Jesucristo. En Lucas 13:24, se nos advierte sobre la dificultad de alcanzar la salvación: “Esforzaos por entrar por la puerta estrecha; porque os digo que muchos procurarán entrar, y no podrán”. Este pasaje nos recuerda que el camino hacia la vida eterna es angosto y que, a menudo, pocos son los que logran encontrarlo. La mayoría opta por la vía ancha, el camino que lleva a la perdición, dejando a un lado la verdad que podría haberles liberado. El Señor Jesús nos promete en Juan 14:27: “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como la da el mundo. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo”. Esta paz es un regalo divino que solo aquellos que han entregado sus vidas a Él pueden experimentar verdaderamente. Es una paz que sobrepasa todo entendimiento, un refugio en medio de la tormenta. Finalmente, el libro de Apocalipsis nos ofrece una esperanza gloriosa: “Bienaventurados de aquí en adelante los muertos que mueren en el Señor. Sí, dice el Espíritu, descansarán de sus trabajos, porque sus obras con ellos siguen” (Apocalipsis 14:13). Esta es la verdadera esperanza que nos anima a vivir de acuerdo con los principios del Reino de Dios. Para aquellos que han elegido seguir a Cristo, la muerte no es el fin, sino el comienzo de una vida eterna en Su presencia. En conclusión, al reflexionar sobre la muerte y el descanso eterno, es esencial recordar que la vida es un regalo que debemos aprovechar para buscar y conocer a Dios. No dejemos que el tiempo se nos escape sin tomar la decisión de vivir en Su luz. La exhortación es clara: debemos predicar, enseñar y vivir la verdad del Evangelio, para que otros también puedan encontrar el camino que lleva a la vida y, así, disfrutar del descanso eterno que solo se encuentra en Cristo Jesús.
@albertoguzmansiervodejesus316420 күн бұрын
😂😂😂😂😂😂😂
@albertoguzmansiervodejesus316420 күн бұрын
😂😂😂😂😂😂😂😂😂😂😂
@matematicaazarcaosvariable650420 күн бұрын
Para los que Van a Morir Este Fin de Semana: No Mueran Sin Cristo La muerte es un tema que puede resultar incómodo, pero es una realidad inevitable que todos enfrentamos. Este fin de semana, tal vez haya personas que se encuentren al borde de esa transición. La pregunta crucial es: ¿estás preparado para lo que viene después? Es vital reflexionar sobre el destino eterno que espera a cada uno de nosotros. Solo Hay Dos Caminos La Escritura nos enseña que después de la muerte, solo hay dos lugares: la vida eterna en la presencia de Dios o la separación eterna de Él. En las redes sociales, vemos frecuentemente mensajes de condolencias que expresan: "Descanse en paz". Sin embargo, debemos meditar sobre el significado de ese descanso. Si una persona muere sin Cristo, no puede experimentar ese descanso eterno. En 2 Timoteo 4:2 se nos exhorta a predicar la palabra de Dios "a tiempo y fuera de tiempo". Este es un llamado urgente a compartir el evangelio, a advertir a otros sobre la importancia de conocer a Cristo antes de que sea demasiado tarde. El Verdadero Descanso en Paz El verdadero descanso en paz solo se aplica a aquellos que han vivido y muerto en Cristo Jesús. Filipenses 1:21 dice: "Porque para mí el vivir es Cristo y el morir es ganancia". La muerte para un creyente es el inicio de una nueva vida en la gloria eterna. Pero esto no se aplica a todos. Marcos 16:15-16 nos recuerda que "el que creyere y fuere bautizado será salvo; más el que no creyere será condenado". Esta es la realidad que no podemos ignorar. La Oportunidad del Libre Albedrío Todos tenemos la oportunidad de elegir nuestro destino eterno. El libre albedrío es un regalo divino. Jesús no desea la muerte del pecador, sino que se arrepienta y viva. Esta es la razón por la cual la Palabra de Dios debe ser proclamada con urgencia, para que más personas vengan al conocimiento de Su salvación. El evangelio es la única alternativa para obtener vida eterna. Así como una empresa tiene sus requisitos para ser parte de ella, el reino de los cielos también tiene sus normas. La única forma de acceder a esta gloria es a través de Jesucristo, el Creador y Salvador. La Realidad de la Salvación Lucas 13:24 nos advierte que "pocos son los que se salvan". Esta declaración debe ser un llamado a la reflexión. No todos los caminos conducen a la vida; de hecho, el camino de la perdición es amplio y muchos lo eligen. Sin embargo, la puerta hacia la vida eterna es estrecha y pocos son los que la encuentran. La Paz que Solo Cristo Ofrece En Juan 14:27, Jesús dice: "La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como la da el mundo". Esta paz es un regalo que solo aquellos que están en Cristo pueden experimentar. Es un consuelo en medio de las dificultades y un ancla en la tormenta. Además, en Apocalipsis 14:13 se nos promete: "Bienaventurados de aquí en adelante los muertos que mueren en el Señor". Esta es una esperanza maravillosa para todos los que han vivido en fe. Conclusión Si este fin de semana te encuentras frente a la muerte, o si conoces a alguien que podría estarlo, no te atrevas a irte sin Cristo. La decisión que tomes hoy tiene consecuencias eternas. Aprovecha cada momento para compartir el mensaje de salvación, para que otros también puedan descansar en paz. Vivamos con la certeza de que, al final de nuestro camino, estaremos en la presencia de nuestro Salvador.
@carlos10524 күн бұрын
Ya, me tienes hastabla madre con tus vídeos pendejos y estúpidos sin sentido, pero la culpa la tenemos nosotros por seguirte, pero hasta aqui, unfollow, antes aportabas cosas utiles, ahora solo publicas basura, hasta nunca 👋
@LellBenjamin26 күн бұрын
Le subiste el brillo al iPhone 11, el 13 pro grabando normal la da mil vueltas
@angelrodriguez437829 күн бұрын
Vendes humo
@remachita0617Ай бұрын
Cualquiera que usa tu link, tu ganas dinero🤣🤣🤣🤣vaya vida financiera 🤣🤣🤣🤣🤣
@juliotorrens9809Ай бұрын
Donde esta el link? Y tu promo code?
@matematicaazarcaosvariable6504Ай бұрын
¡Si rechaza a Jesucristo como su Salvador, un día estará en el infierno! Hebreos 9:27 dice: "Y de la manera que está establecido para los hombres que mueran una sola vez, y después de esto, el juicio." El hombre tiene una cita de morir una vez... y un día - USTED morirá. Y en el infierno alzó sus ojos, estando en tormentos. Cuando deje su cuerpo, comprenda que algo está pasando. Escuche un sonido... cada vez más y más fuerte... gritando... llorando... lamentando. Terror y temor al saber que algo que no entiende le está atrapando. "¡No puede estar pasando!" usted grita, oliendo ese horrible olor de almas quemándose. Su cara arde de calor. Llamas están ahora saliendo de sus ojos, nariz, oídos, boca - de cada apertura de su cuerpo, están saliendo llamas. Su cuerpo está crujiendo por las llamas. Su cuerpo está ahora convulsionándose del horrible dolor. "¿Por qué no muero?", grita usted. Comienza a lamentarse y a crujir sus dientes. "¿Cuándo acabará este dolor?" Pero usted sabe que nunca se acabará... Las tinieblas son aterrorizantes, le comienzan a sumergir. Siente algo moviéndose en las tinieblas... algo horrible está pasando. "¡No! ¡No! Esto no puede estarme pasando", usted grita - mientras su gusano está emergiendo. Usted comienza a maldecir el día en que nació y grita: "¡Oh Dios! ¿Por qué no me advertiste?" Pero comienza a recordar cuando el predicador le rogaba que recibiera al Señor Jesucristo como salvador. Se recuerda leyendo ese tratado evangelístico. De nuevo grita: "Dios, ¿no te importa?" Pero usted recuerda Juan 3:16: "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo Unigénito..." "Dios es un Dios de amor - Él no lo permitiría", grita usted, pero recuerda Juan 3:36: "...el que rehúsa a creer en el Hijo no verá la vida; sino que la ira de Dios está sobre él." Entonces se da cuenta de que Jesucristo tenía razón: hay un lugar llamado Infierno. ¡Y USTED ESTÁ AHÍ - PARA SIEMPRE! Pero Dios es un Dios de AMOR... ¿Por qué un DIOS DE AMOR me va a mandar al infierno? Sí, Dios es un DIOS DE AMOR - pero Dios es también un DIOS SANTO. UN DIOS SANTO demanda pago por el pecado; de otra forma, Dios no sería y no podría ser SANTO. Porque Dios es santo, el pecado DEBE ser condenado. Josué 24:19 dice: "... Él es un DIOS SANTO... No sufrirá vuestras transgresiones ni pecados." PERO, AMIGO, ¡HAY BUENAS NOTICIAS! Dios no le quiere en el Infierno. El Infierno no fue hecho para el hombre. Mateo 25:41 dice que fue "...preparado para el Diablo y sus ángeles." Por lo mismo que Dios es un DIOS DE AMOR, y Él LE AMÓ tanto, que envió a Su Hijo, Jesucristo, a esta tierra para morir una cruel muerte en una cruz, para pagar el precio que el DIOS SANTO demandaba por nuestros pecados. Romanos 5:8 dice: "Mas Dios muestra su amor para con nosotros, en que, siendo aún pecadores, Cristo murió por nosotros." Dios no manda al Infierno. Usted escoge ir al Infierno cuando rechaza al Señor Jesucristo. Cuando rechaza el amoroso regalo de Dios de vida eterna en Jesucristo... ¡USTED ESCOGE IR AL INFIERNO! El multimillonario Ted Turner, dueño de la cadena CNN, los Bravos de Atlanta y otros conglomerados, dijo en una entrevista: "Estoy esperando mi muerte y ser mandado al infierno. Es allí donde debo estar." Usted dice: ¡es un tonto! Pero, amig@, cuando usted dice "No" a Jesucristo y su pago por su pecado - ¡está diciendo lo mismo! Le está diciendo a Dios: "Yo no necesito a Jesucristo - ¡Yo pagaré por mis pecados en el infierno!" Si rechaza el regalo de vida eterna a través de Jesucristo... ¡UN DÍA USTED ESTARÁ EN EL INFIERNO!
@KronpierАй бұрын
Inf
@matematicaazarcaosvariable6504Ай бұрын
La mentira y el engaño te llevarán al infierno “Todos los mentirosos tendrán su parte en el lago que arde con fuego y azufre” (Apocalipsis 21:8). Hoy en día, en nuestra sociedad, la mentira abunda a montones y a la gente le fascina mentir constantemente, no sabiendo que esto nos traerá consecuencias eternas. Tenemos que aprender a vigilar lo que hablamos y prometemos a diario. Es mejor decir sí o no, pero no decir a nadie mentiras. Y si mentimos, recordemos pedirle perdón al Señor. Recuerde que tenemos un abogado, y él es fiel y justo para perdonarnos, pero esto no significa que voy a utilizar la mentira constantemente como un medio de escape para obtener un beneficio personal. Recuerde que necesitamos arrepentirnos. Mentimos a causa de nuestra naturaleza pecaminosa; mira lo que dice la Biblia al respecto: “Se apartaron los impíos desde la matriz; se descarriaron hablando mentira desde que nacieron” (Salmos 58:3). La mentira es parte de nuestra naturaleza; somos pecadores. Para los impíos es un placer mentir, y entre más mentiras dicen, más se gozan en su maldad. No les interesa poner freno a su lengua, ni mucho menos dejar de mentir. Recuerde que en el evangelio, la justicia de Dios se revela por fe y para fe, de principio a fin: “más el justo vivirá por la fe”. Sin embargo, muchos blasfemos solo les interesa utilizar la mentira para su beneficio. Indiscriminadamente, no solo se complacen mintiendo, sino robando. ¿Por qué? Porque a ellos solo les interesa lograr su objetivo a cualquier precio; se empeñan en seguir mintiendo y no prestan atención a la palabra escrita. Pero ya lo había dicho Jesús: “por más que oigan, no entenderán; por más que vean, no verán, porque su entendimiento está cegado”. Veamos lo que dice la Biblia: “El justo aborrece la palabra de mentira; más el impío se hace odioso e infame” (Proverbios 13:5). Aquí, la justicia consiste en obedecer a Dios. Cuanto más justicia hay, menos mentira habrá. Pero la impiedad aumenta la falsedad. “Ciertamente mi pueblo son hijos que no mienten” (Isaías 63:8). Dios quiere un pueblo santo, puro, dueño de sí mismo, que ame la verdad y que se aparte de todo aquello sospechoso que está ocasionando daño a la gente y enviándola al infierno. Recuerde que el que encubre pecados no prosperará, pero el que los confiesa y se aparta alcanzará misericordia. La mentira abunda porque el pueblo del Señor es poco. El verdadero hijo de Dios ama la verdad y se aparta de toda mentira y engaño. “No mintáis los unos a los otros, habiéndonos despojado del viejo hombre con sus hechos” (Colosenses 3:9). Solo los pecadores mienten. El que abandona su vieja manera de vivir también abandona la mentira, el engaño y la estafa vendiendo himo. Veamos: “El testigo falso no quedará sin castigo, y el que habla mentiras no escapará” (Proverbios 19:5). Dios ni siquiera puede aceptar las mentiras que se dicen en broma, porque esa es parte de nuestra vieja naturaleza. Veamos: “Como el que enloquece y echa llamas, saetas y muerte, tal es el hombre que engaña a su amigo y dice: Ciertamente lo hice en broma” (Proverbios 26:18-19). Entonces debes prometerle a Dios que dejarás de mentir, y las veces que lo hagas, pídele perdón. Mejora en la próxima y no lo vuelvas a hacer. El Espíritu Santo te renovará día a día hasta llegar a la estatura de Cristo Jesús. ¡Aleluya! Día a día Dios te ayudará a renovar la vieja naturaleza por la nueva naturaleza, creciendo de gloria en gloria. No te des por vencido; continúa. Recuerda que tenemos un abogado para todos aquellos que hemos nacido de nuevo; él siempre estará listo para ayudarte. Veamos: “Mis labios no hablarán iniquidad, ni mi lengua pronunciará engaño” (Job 27:4). Clama a Dios por su ayuda: “Libra mi alma, oh Jehová, del labio mentiroso y de la lengua fraudulenta” (Salmos 120:2). Tenemos que reconocer que Dios ayuda a los suyos por un cambio grandísimo. Veamos: “Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne. Y pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y haré que andéis en mis estatutos, y guardéis mis preceptos y los pongáis por obra” (Ezequiel 36:26-27). Puesto que la naturaleza vieja se inclina automáticamente a la mentira, Dios nos da una naturaleza nueva. ¡Aleluya! Y esta naturaleza ahora desea hacer lo bueno, nunca lo malo. “Porque Dios es el que en vosotros produce así el querer como el hacer, por su buena voluntad” (Filipenses 2:13). Finalmente, no olvides que todos los mentirosos serán condenados en el lago de fuego y azufre. Entrégate a Jesús y evita este fin horroroso. Te ruego que arregles cuentas con Dios antes de que pierdas la oportunidad de entrar al cielo. Abandona tus pecados y busca a Dios de todo corazón. Lee la Biblia diariamente y obedécela. Busca una iglesia bíblica compuesta de verdaderos creyentes que amen la verdad íntegra de la palabra de Dios, que sean humildes y obedientes a los mandamientos del Señor. Si no conoces ninguna iglesia con estas características, ora diariamente; el Espíritu Santo te ayudará al cambio. Recuerda que la iglesia eres tú. Inicia hoy mismo una relación con tu Padre celestial desde tu aposento. Allí, en tu recámara, di: “Señor Jesús, yo reconozco que soy un pecador, que mi pecado me separa de ti, que mi vida no tiene sentido, que he mentido constantemente y que siento que mi alma se muere”. Hoy, Señor, vengo delante de tu presencia y me arrepiento de todos mis pecados. Te pido perdón por todo lo malo que he hecho. Quiero que me des una nueva naturaleza y que me ayudes día a día a apartarme del mal y buscar el bien. Que tu Espíritu Santo me ilumine siempre y me dirija cada vez más hacia la verdad. Háblame, Señor; te obedeceré a través de tu palabra, y mi hogar, mis hijos, mi esposa, mi familia serán mi iglesia donde congregarme. Ayúdame, Señor. ¡Gracias!
@matematicaazarcaosvariable6504Ай бұрын
Un Día Vas a Morir: ¿Sabes Dónde Pasarás la Eternidad? En las redes sociales, la vida se muestra con una ilusión de permanencia. Pero la verdad es que la muerte es el destino inevitable de todos, y todos enfrentaremos un momento en el que debemos rendir cuentas. Cuando un ser querido fallece, a menudo encontramos consuelo en la frase "descanse en paz". Sin embargo, debemos reflexionar sobre lo que realmente significa ese descanso. La realidad es que solo aplica a aquellos que han vivido y muerto en Cristo Jesús. La Palabra de Dios nos advierte sobre la importancia de nuestras decisiones en vida. En 2 Timoteo 4:2 se nos instruye: “Predica la palabra; inste a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina”. Esta exhortación nos recuerda la urgencia de compartir el evangelio mientras aún hay tiempo. La vida es efímera, y el tiempo para actuar es ahora. Si alguien muere sin Cristo, la verdad es que no puede experimentar ese descanso en paz. Filipenses 1:21 nos enseña: “Porque para mí el vivir es Cristo y el morir es ganancia”. Esta afirmación nos muestra que la verdadera paz después de la muerte es un regalo reservado solo para quienes han aceptado a Cristo en sus vidas. La Palabra de Dios es clara: “Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura” (Marcos 16:15). Todos tenemos la oportunidad de elegir entre la salvación y la condenación. El Señor no desea la muerte del pecador, sino que se arrepienta y viva (Ezequiel 33:11). Por ello, es crucial que hablemos de Su palabra, instando a otros a conocer a Dios mientras aún hay aliento en sus cuerpos. Es lamentable que no todos mueran en la fe. Así como una empresa tiene reglamentos que cumplir para ser parte de ella, el reino de los cielos también tiene sus requisitos. Hay un solo evangelio que conduce a la salvación: el del Nombre del Señor Jesucristo. Él es el Creador, el Salvador, y el único camino hacia la vida eterna (Juan 14:6). Las Escrituras nos advierten que son pocos los que se salvan. En Lucas 13:24 se nos dice: “Entrad por la estrecha puerta; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella; 14 porque estrecha es la puerta, y angosto el camino que lleva a la vida, y pocos son los que la hallan”. Este versículo es un recordatorio de que la vida cristiana puede ser un camino difícil, pero es el único que conduce a la vida eterna. En momentos de tribulación, Jesús nos ofrece Su paz. “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como la da el mundo. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo” (Juan 14:27). Esta paz es única y solo se encuentra en Él. Finalmente, el libro de Apocalipsis 14:13 nos dice: “Bienaventurados de aquí en adelante los muertos que mueren en el Señor. Sí, dice el Espíritu, descansarán de sus trabajos, porque sus obras con ellos siguen”. Que este versículo nos inspire a vivir de tal manera que, al final de nuestro camino, podamos descansar en paz en la presencia de nuestro Salvador. Así que, en las redes sociales, usemos nuestras plataformas para compartir este mensaje de esperanza y urgencia. Hablemos de la vida y la muerte con la seriedad que merecen, y recordemos que el tiempo para actuar es ahora. Cada día es una nueva oportunidad para vivir en la fe y compartir el mensaje que puede cambiar vidas.
@matematicaazarcaosvariable6504Ай бұрын
En las Redes Sociales: Un Llamado a la Reflexión sobre la Vida y la Muerte La muerte es un tema que inevitablemente nos toca a todos. Cuando perdemos a un ser querido, a menudo encontramos consuelo en frases como "descanse en paz". Sin embargo, es crucial recordar que el descanso eterno solo se aplica a aquellos que han vivido y muerto en Cristo Jesús. La Palabra de Dios nos advierte sobre la importancia de nuestras decisiones en vida. Como dice 2 Timoteo 4:2: “Predica la palabra; inste a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina”. Esta exhortación nos recuerda la urgencia de compartir el evangelio mientras hay tiempo. La realidad es que, si alguien muere sin Cristo, no puede experimentar ese descanso. Filipenses 1:21 nos enseña: “Porque para mí el vivir es Cristo y el morir es ganancia”. Esto implica que la verdadera paz después de la muerte es un regalo reservado para quienes han aceptado a Cristo en sus vidas. El llamado es claro: "Id por todo el mundo y predicad el evangelio a toda criatura" (Marcos 16:15). Cada persona tiene la oportunidad de elegir entre la salvación y la condenación. El Señor no desea la muerte del pecador, sino que se arrepienta y viva (Ezequiel 33:11). Es por ello que debemos hablar de Su palabra, instar a otros a conocer a Dios mientras aún hay aliento en sus cuerpos. En este sentido, es lamentable que no todos mueran en la fe. Así como una empresa tiene reglamentos para ser parte de ella, el reino de los cielos también tiene sus requisitos. Solo hay un evangelio que lleva a la salvación: el del Nombre del Señor Jesucristo. Él es el Creador, el Salvador, y el único camino hacia la vida eterna (Juan 14:6). Las Escrituras nos advierten que son pocos los que se salvan. En Lucas 13:24 se nos dice: “Entrad por la estrecha puerta; porque ancha es la puerta, y espacioso el camino que lleva a la perdición, y muchos son los que entran por ella”. Es un recordatorio de que la vida cristiana puede ser un camino difícil, pero es el único que conduce a la vida eterna. En momentos de tribulación, Jesús nos ofrece Su paz. “La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como la da el mundo. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo” (Juan 14:27). Esta paz es única, y solo se encuentra en Él. Finalmente, el libro de Apocalipsis 14:13 nos dice: “Bienaventurados de aquí en adelante los muertos que mueren en el Señor. Sí, dice el Espíritu, descansarán de sus trabajos, porque sus obras con ellos siguen”. Que este versículo nos inspire a vivir de tal manera que, al final de nuestro camino, podamos descansar en paz en la presencia de nuestro Salvador. En las redes sociales, usemos nuestras plataformas para compartir este mensaje de esperanza y urgencia. Hablemos de la vida y la muerte con la seriedad que merecen, y recordemos que el tiempo para actuar es ahora.
@albertoguzmansiervodejesus3164Ай бұрын
Excelente 🎉🎉🎉
@matematicaazarcaosvariable6504Ай бұрын
La Farsa de la Felicidad en las Redes Sociales: Un Llamado a la Realidad Vivimos en una era donde las redes sociales se han convertido en una ventana al mundo, y, para muchos, también son un espacio donde se muestran las mejores versiones de sí mismos. Fotos perfectas, sonrisas radiantes, viajes soñados y celebraciones deslumbrantes parecen ser la norma. Sin embargo, detrás de estas publicaciones, a menudo, se oculta una realidad mucho más compleja y dolorosa. Lo que muchos no nos atrevemos a ver es que, detrás de la felicidad aparente, puede haber sufrimiento, soledad y tristeza. Esta es una verdad que a veces olvidamos, pero que la Biblia nos recuerda con sabiduría: la apariencia externa no siempre refleja la realidad interna. La Farsa de las Redes Sociales: Apariencia vs. Realidad El mundo digital ha creado una especie de “escapatoria” donde la gente busca compartir solo los momentos más felices de sus vidas. Pero, ¿cuántas veces nos hemos encontrado con amigos y vecinos que publican fotos de celebraciones, eventos o relaciones perfectas, solo para descubrir más tarde que esas mismas personas estaban atravesando momentos difíciles o incluso tragédias personales? Una de las ironías de la vida moderna es que, aunque estamos más conectados que nunca a través de las redes sociales, también podemos estar más desconectados de la realidad. Las redes pueden mostrar una versión de la vida que dista mucho de lo que en realidad experimentamos. Y la tristeza es que muchos caen en la trampa de compararse con los demás, creyendo que todos viven una vida perfecta, cuando en muchos casos, lo que se publica es solo una pequeña parte de una vida mucho más compleja. La Tragedia de la Apariencia: El Peligro del Engaño En mi propia experiencia, he conocido amigos y vecinos que celebraban con entusiasmo sus relaciones y sus momentos de felicidad en las redes sociales, solo para descubrir después que esas relaciones no duraban. He visto parejas que compartían fotos románticas y mensajes de amor, solo para separarse unos meses después. Las historias de felicidad que se mostraban al mundo a menudo terminaban en tristeza o tragedia, como el fin de una relación o el desengaño de una vida que no era lo que parecía ser. Es en esos momentos que debemos recordar que la felicidad de las redes sociales no es la felicidad verdadera. El deseo de mostrar una vida perfecta puede llevar a las personas a vivir en una especie de “burbuja” emocional, donde lo importante es el qué dirán, la apariencia o la aceptación en la comunidad virtual, pero no la paz y la satisfacción interna. El Señor nos advierte acerca de no basar nuestra vida en las apariencias, ya que “el corazón es engañoso más que todas las cosas” (Jeremías 17:9). La Sabiduría Bíblica: Apariencia vs. Realidad La Biblia nos habla sobre la importancia de la sinceridad y de no dejarnos llevar por las apariencias. En el libro de Proverbios, el Señor nos enseña que “engañosa es la gracia, y vana la hermosura; la mujer que teme a Jehová, esa será alabada” (Proverbios 31:30). Este versículo no solo habla de la belleza externa, sino de la importancia de vivir de manera sincera y auténtica. La belleza y la felicidad que se ven desde fuera no siempre son un reflejo de la paz y la alegría interior que realmente sentimos. Jesucristo también nos advirtió contra el peligro de las apariencias en el Sermón del Monte, cuando dijo: “No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orinco destruyen, y donde los ladrones minan y hurtan” (Mateo 6:19). Las cosas materiales y las publicaciones de las redes sociales pueden ser engañosas, y cuando basamos nuestra felicidad en ellas, terminamos construyendo nuestra vida sobre cimientos que no son sólidos. La Tragedia Personal: La Realidad Tras la Apariencia Conocer la realidad detrás de la felicidad mostrada en las redes sociales es algo que muchos de nosotros hemos experimentado. La vida no siempre es como aparece en las fotos; hay personas que, por miedo al juicio o al rechazo, prefieren ocultar sus luchas y mostrar solo su lado positivo, aunque estén enfrentando problemas profundos en su vida personal o familiar. La Biblia nos invita a no vivir una vida falsa ni a seguir la corriente de aquellos que solo buscan mostrar lo que quieren que veamos. En 1 Samuel 16:7, el Señor le dice a Samuel: “No mires a su parecer, ni a lo grande de su estatura, porque yo lo desecho; porque Jehová no mira lo que mira el hombre, pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón”. Esto nos enseña que, a diferencia de lo que se muestra en las redes, el valor de una persona no está en su apariencia o en la vida que proyecta, sino en lo que hay en su corazón. No se trata de lo que aparentamos ser, sino de lo que realmente somos en nuestro interior. La apariencia puede engañar, pero Dios conoce nuestra verdad más profunda. El Llamado a la Realidad: Vivir con Sinceridad y Humildad Vivimos en tiempos en los que la vida digital a menudo reemplaza la conexión genuina entre personas. Las redes sociales, si bien nos permiten estar más conectados, también nos empujan a comparar nuestras vidas con las de los demás, buscando validación en la aprobación externa. Sin embargo, el Señor nos llama a vivir con humildad, a no dejar que las apariencias nos desvíen del propósito verdadero de nuestra vida. En 2 Corintios 4:18, el apóstol Pablo nos recuerda: “No mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; porque las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas.” Es vital que recordemos que la felicidad verdadera no está en lo que mostramos en las redes sociales ni en lo que los demás ven, sino en cómo vivimos con integridad, en nuestra relación con Dios y con los demás. En lugar de caer en la trampa de vivir para los “likes” o la aprobación social, debemos buscar una vida auténtica, basada en la paz interna, el amor y la humildad. Conclusión La felicidad que se muestra en las redes sociales no siempre es un reflejo de la realidad. Detrás de las imágenes perfectas y las celebraciones glamorosas, puede haber desdicha, soledad o frustración. La Biblia nos recuerda que, aunque el mundo mire solo lo que se ve, el Señor examina lo más profundo de nuestro corazón. Vivir de manera sincera y auténtica, en lugar de basarnos en las apariencias, es el camino hacia una felicidad verdadera y duradera. Siguiendo la guía divina y buscando la paz interna, podemos encontrar la verdadera alegría, más allá de lo que las redes sociales nos quieren hacer creer. Versículos clave para reflexionar: Jeremías 17:9: "Engañoso es el corazón más que todas las cosas, y perverso; ¿quién lo conocerá?" Proverbios 31:30: "Engañosa es la gracia, y vana la hermosura; la mujer que teme a Jehová, esa será alabada." Mateo 6:19: "No os hagáis tesoros en la tierra, donde la polilla y el orinco destruyen, y donde los ladrones minan y hurtan." 1 Samuel 16:7: "Jehová no mira lo que mira el hombre, pues el hombre mira lo que está delante de sus ojos, pero Jehová mira el corazón." 2 Corintios 4:18: "No mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; porque las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas."
@javierguadaluperodriguezcr855Ай бұрын
Pues enseñanos
@ElenaMedina-g6oАй бұрын
Una pregunta amigo para que le quitan la espiga saludos desde oaxaca mexico
@marialysantoniaaquinoguzma7771Ай бұрын
Hola, me enseñas cómo?
@martinvictorianorojocastro6946Ай бұрын
Muy bien tienes razón luchastes y te enfocastes
@albertoguzmansiervodejesus3164Ай бұрын
Muy cierto
@eduardogonzalezespinosa9822Ай бұрын
Y donde se pueden comprar esas acciones
@eduardogonzalezespinosa9822Ай бұрын
Y dónde se puede hacer eso bro
@RamirezRamirez-s2fАй бұрын
Un trillón de like 👍
@ronygimenez880Ай бұрын
Cómo se llama ese dispositivo, me gusta demasiado.
@EdwinMatute-o6mАй бұрын
Yo opino que estas bien lindo vente conmigo a new york