Sure

I think you’re minimizing this a little bit don’t you think?😒

​@@chrisobrien6254as a volunteer for nearly 25 years in their soup kitchens in NYC and NJ I can say THEY ARE AMAZING!!! LOVING, PEACEFUL SELFLESS WOMEN!!! my church in NJ supplies the food for a soup kitchen in NJ and one in Harlem and it isn't garbage. To the contrary. And by the way who do you think is feeding and clothing the illegal immigrants on the streets in the inner cities, or the elderly home bound in the inner cities, and running summer day camp for children. It's these women who go into the crack dens to deliver a meal to sick elderly or disabled.." Heaven's Door Dash"! WOULD YOU GO?

If these are to be holy women of God, this abuse should have never occurred. The Lord will hold every word, deed and thought accountable on the Day of Judgement. Not even a bishop can overturn God's Word and Judgement.

Basta vedere come il settore educativo sia un gineceo.

Maybe it wasn't nutured or maybe She was better off out of it

Estimado, quisiera aportar que el problema no es la falta de vocación. Lo demuestra el deseo de santidad de las religiosas, quienes sin duda, se entregan con heroísmo y abnegación a una causa tan noble. Es lo que hizo Anna. No hay duda que Dios lo tiene en cuenta. El problema está en que las personas que deseamos ser fieles y de verdad entregados, ponemos a las autoridades (superiora, director espiritual, pastor, o quien ejerce la posición de maestro ante un discípulo) en un lugar en nuestra conciencia, donde nadie debería interferir en nuestra relación con Dios. Y ellos, los que están en posición de maestros deben cuidar de evitar eso. Y cuando no lo hacen y comienzan a abusar de esa posición que nosotros mismos les damos, movidos por las virtudes de la obediencia, humildad, renuncia de si mismo, entre otras, nos encontramos con el abuso espiritual y de conciencia. Así se dan las circunstancias como las que describe Anna, que se negó a si misma por amor a Dios, y nadie de la congregación cuidó que no se abusara de eso. Eso fue vocación, y su relato deja claro que se abusó de su entrega. El fruto de las obras de la congregación es muy bueno, pero ¿a qué costo de las religiosas? ¿Es necesario que se las trate como relata Anna? ¿Es lo que quiere Dios? Le hago este aporte con el sincero deseo de aportar una visión de una persona que también vivió el abuso espiritual, en otro contexto, y en el cual también ocurrían cosas muy buenas, pero el líder a quién seguí, se extralimitó ampliamente en su intervención sobre mí, aduciendo que la obediencia era el camino a la santidad. Y fui obediente, de lo cual me alegro. Volvería a vivir mi fe así, pero no en manos de un abusador de conciencia. Pienso que Anna ha sido muy valiente al dar la cara, y está ayudando a que las cosas en la congregación sean mejores, por el bien de la Iglesia , de las hermanas que están hoy ahí, y por los frutos que se esperan de su entrega y abnegada labor.

No puedes juzgar así, está era una hermana excelente