Nunca es tarde para regresar a Dios, el como padre si reconocemos que no somos nada sin el nos recibe con brazos abiertos y llenos de amor. El tiene lo mejor para cada uno de nosotros y solo espera corazones enamorados y apasionados por el que lo busquen

Dios es paz .es amor es tranquilidad.

Dios es paz es amor es tranquilidad.

Dice la Palabra de Dios: Venid a mi todos los que estáis trabajados y cargados. Yo soy manso y humilde” (Mateo 11:28,29). Él demostró su mansedumbre en Su entrega y en Su obediencia a Dios Padre para realizar el plan de Salvación del ser humano, a pesar del coste, del sacrificio, de esa entrega total y voluntaria. Jesucristo fue totalmente inofensivo y fiable. Él era manso y humilde, él llego a lavar los pies de sus discípulos, para dejarles un modelo de humilde entrega, servicio y amor. El Rey de Reyes, inclinado sobre los pies sucios del polvo del camino de sus discípulos. Es verdad que es una escena tan conmovedora en su sencillez y profundidad. Aquí tenemos una vida que destaca por su encanto, por la sobriedad, la autenticidad, y la coherencia. Su vida era como el perfume de una flor hermosa y frágil. Su venida fue una doxología (se usa para indicar la propiedad de dar gloria a Dios - una expresión de alabanza a Dios). Su estadía entre la gente fue una innegable bendición. Y también lo fue su partida, a nadie dejaba indiferente, y hasta aquellos que no creían en Él quedaban conmovidos por su ternura, sencillez y sensibilidad. Así es mi Dios y Señor Jesucristo, Él mas que nadie sabe que nosotros no podemos solos, Él nos entiende y por lo mismo debemos depender totalmente de Él. Definitivamente la vida de un cristiano no es fácil, y claramente lo vemos en la Biblia, pero tomados de la mano de Dios, todo nos es posible. Te lo dice alguien a quien el Dios Todopoderoso le dio una segunda oportunidad. Dios te bendiga y te animo a seguir adelante porque el tiempo cada vez es mas corto y nuestro Señor Jesucristo no demora en regresar por los suyos. Recibe toda la gloria y toda la honra precioso Hijo de Dios. Amen.