Рет қаралды 648
Tras salir de Puerto Río Tranquilo dejaría de recorrer la carretera austral para llegar a Puerto Guadal. Y después, la idea era ir de Puerto Guadal a Chile Chico (110km) en 2 días. Tendría que acampar a mitad de ruta.
Diferentes personas locales me habían recomendado la ruta por la belleza del recorrido. Y también me advirtieron que en esa zona era habitual el viento patagónico, sobre todo en Chile Chico. Ingenuo de mi, en mi cabeza se pronosticaban 2 días ciclando sin prisa y disfrutando del paisaje. Nada más lejos de la realidad.
Se convirtieron en los 2 días más duros de todo mi viaje por la carretera austral. El recorrido tenía fuertes pendientes de subida y bajada constantes, sin tramos llanos apenas. Algo que nadie me había advertido y yo, tampoco le di mucha importancia cuando revise el perfil de la ruta antes de salir. Pensé que era más de lo mismo. Nada nuevo...
Además, la pista era terrible en su mayoría: piedra suelta, suelo corrugado, huecos, baches... Vaya, una delicia. Y para rematarlo, el querido viento patagónico. Era fuerte y cambiante. A ratos venía lateral y me zarandeaba de lado a lado de la pista como una marioneta, a ratos frontal obligando a tener que andar empujando la bici y, a ratos con viento de cola. Este duraba poco pero te daba un empujón de moral al poder avanzar con menos esfuerzo.
La verdad es que casi todas las subidas las hice empujando la bici. Fuera por el cansancio acumulado o por la dureza del terreno, era lo único que mi cuerpo era capaz de hacer. En dos ocasiones, conductores de camiones se pararon ofreciéndome cargar la bici y llevarme (amabilidad chilena otra vez). Era una carretera poco transitada, y la verdad es que estuve tentado pero pensé que aún tenía horas de luz suficientes para llegar al lugar de acampada que había revisado antes de salir y, mientras pudiera poner un pie delante del otro quería seguir por mi mismo. Sinceramente, mi situación era crítica pero llámalo ego o tozudez, rechacé las ofertas. Debo reconocer que más tarde sentí algo de arrepentimiento por no haber aceptado...
No obstante, el paisaje era espectacularmente bello. El lago de agua color turquesa, montañas majestuosas y picos nevados. Estaba en el paraíso y en el infierno al mismo tiempo.
A media tarde el viento ya era muy fuerte y mi agotamiento muy alto. Me faltaban aún unos km para llegar al punto de acampada pero empezaba a estar ya de mala leche y decidí buscar algún sitio y parar. Y así fue que entre arbustos encontré un hueco y allí planté la tienda, con permiso del señor viento. Que por la noche aún era más fuerte. Movía toda mi tienda y realmente pensaba que podría llegar a desgarrarse. Fue una noche entretenida 😅
Al día siguiente, finalmente llegué a mi destino. Agotado pero triunfante.
La Patagonia es muy bella.
Muchas gracias por esta experiencia inolvidable.
-----------------------
Música:
Changing Me - Madison York
Dayon Ribon of Silk (Instrumental) - Victor Lundberg
By your side - Ten Towers