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Defensa de Arica en la Guerra del Pacífico. El 3 de abril de 1880, el coronel Francisco Bolognesi asumió el mando de la defensa del puerto peruano de Arica, sitiado por las fuerzas chilenas al mando del general Manuel Baquedano. Bolognesi ordenó la construcción de tres baterías o fuertes en la playa, que eran el "San José", el "Santa Rosa" y el "Dos de Mayo", y en el Morro, por el lado Este, otros dos fuertes, llamados "Ciudadela" y el "Este", para defenderlo de un posible ataque por ese lado. Algunas de estas construcciones se realizaron a base de sacos llenos de arena y otras se excavaron en la roca del cerro. Entre los fuertes de la playa y los del Morro ordenó levantar una muralla con sacos de arena. Además, formó partidas de caballería para que vigilaran por el norte y por el sur, y ordenó el tendido de una triple red de protección con minas explosivas terrestres, las cuales debían activarse eléctricamente. Este último trabajo estuvo a cargo del ingeniero Teodoro Elmore, que fue capturado por soldados chilenos días antes de la batalla. Al llegar a Arica la noticia de la derrota del ejército aliado peruano-boliviano en la batalla de Tacna, librada el 26 de mayo, Bolognesi convocó a una junta de sus jefes, a la que asistieron 27 de ellos. El acuerdo unánime que se tomó fue el de morir antes que rendirse y de agilizar los trabajos de fortificación de la plaza. Bolognesi y los defensores de Arica guardaban la esperanza de la llegada de refuerzos, sin embargo, la ayuda nunca llegaría. El 5 de junio de 1880, el mayor Juan de la Cruz Salvo fue enviado por el mando chileno, como parlamentario para intimar a Bolognesi la rendición de Arica. Salvo hizo énfasis en que la enorme diferencia numérica de soldados, armamento y logística entre ambas fuerzas, resultaría en un inútil derramamiento de sangre. Bolognesi le respondió: «Tengo deberes sagrados que cumplir y los cumpliré hasta quemar el último cartucho», y repitió su respuesta en presencia de sus oficiales y con el completo respaldo de estos en la “sala de la respuesta. El 6 de junio hubo un último intento del mando chileno de intimar a la rendición a Bolognesi, enviando en calidad de parlamentario al ingeniero Elmore. Pero el mando peruano se negó a recibirlo como tal, pues siendo Elmore un prisionero peruano, contrariaba las prescripciones militares del caso. En esos mismos momentos, Lagos alistaba su tropa para el ataque. El 7 de junio, el combate se inició por el sector de las baterías del Este a las 5:30 de la mañana, cuando aún todo estaba en oscuridad. El despliegue del 3.º de Línea fue avistado por los centinelas de la batería Ciudadela, rompiéndose los fuegos incluso antes de ordenarlo los comandantes. En el camino, se detonaron dos minas pero ocasionaron pocos daños y apenas detuvo el avance del 3.º de Línea. La división chilena se desplegó en grandes grupos para así disminuir los daños de las minas enterradas. Cuando llegó la primera ola de atacantes, tras una lluvia de balas, las fuerzas defensoras lograron contenerlas mediante un movimiento coordinado de fusilería, explosión de minas y bayonetas. Se ordenó una segunda oleada sobre las posiciones peruanas. Las reducidas fuerzas defensoras fueron finalmente aplastadas por los soldados chilenos que entraron por cientos en la batería. El subteniente chileno José Ignacio López capturó la bandera peruana. En la lucha murieron casi todos los defensores, entre los que destacaron el coronel Justo Arias y Aragüez, jefe del batallón Granaderos de Tacna; el teniente coronel Francisco Cornejo, jefe del batallón Cazadores de Piérola, el sargento mayor Felipe Antonio de Zela, 2.º jefe del Granaderos de Tacna; el sargento mayor Genaro Vizcarra, 2.º jefe del Cazadores de Piérola, entre otros. El cabo peruano Alfredo Maldonado, de 16 años, hizo volar la santabárbara de la batería y en la explosión murieron él, los pocos sobrevivientes heridos a su alrededor y varios chilenos, entre estos últimos, uno de los tres oficiales que izaban la bandera, que habían entrado en la batería Ciudadela. Información: Al visitar el Fuerte Ciudadela, encontré una ofrenda floral colocada a nombre de los que participaron en la creación de la película peruana “Gloria del Pacífico” del director Juan carlos Oganes, en homenaje a los héroes que murieron el 07 de junio de 1880. Este video contiene algunas imágenes de esa notable película. A SOLO METROS DEL ABANDONADO FUERTE CIUDADELA, SE ENCUENTRA EL MONOLITO QUE INDICA EL LUGAR DONDE FUERON ENTERRADOS LOS CUERPOS DE LOS SOLDADOS QUE MURIERON ESE DÍA 07 DE JUNIO DE 1880. ESTE MONOLITO TAMBIÉN SE ENCONTRABA EN TOTAL ABANDONO Y DESTRUIDO. SOLO POR LA INICIATIVA DE POBLADORES ARIQUEÑOS QUE CON SUS PROPIOS RECURSOS ECONÓMICOS Y TRABAJO, DECIDIERON RECONSTRUIR ESTE HISTÓRICO MONOLITO, ANTE LA TOTAL INDEFERENCIA Y FALTA DE RESPETO DE LAS AUTORIDADES CIVILES Y MILITARES. VEA AQUÍ CÓMO SE ENCONTRABA ESTE MONOLITO Y SU PROCESO DE RESTAURACIÓN: • RECUPERACION DEL MONOL...