Рет қаралды 881
De Alejandro Borgmann.
Los Abonos Fermentados, también llamados Bocashi, hacen referencia a un proceso por medio del cual las poblaciones de microorganismos que existen en los propios residuos
producen a través de la fermentación, un material capaz de nutrir el suelo y fertilizar las plantas en sólo 15 días. Es una manera muy rápida para procesar desechos y restos de nuestras chacras.
20 Bolsas de material seco: restos de cosechas picados y secos (restos de maíz, sorgo, bagazo de caña, restos de paja, pastos, avena…), cascarilla de arroz, virutas o aserrines de mínimo 3 meses a cielo abierto.
20 Bolsas de tierra suelta.
20 Bolsas de estiércol fresco: de vaca, o cerdo, o pollos, o conejo, o mezcla de estos.
10 kg de melaza o 20 litros de jugo de caña de azúcar.
1 kg de levadura para pan (granulado o pasta)
1 Bolsa de harina de roca (piedra molida de basalto, o ceniza, o diatomeas, o fosfito).
1 Bolsa de carbón molido
Agua: cantidad necesaria según humedad de los ingredientes. No excederse. Ir comprobando la humedad con prueba de puño.
1 Bolsa de semita de arroz o de trigo (conocido también como salvado, semolín, pulidura, farelo) Puede ser maíz bien molido.
La base es mezclar tierra, estiércol y algún material seco en partes similares, a lo cual se le incorpora levadura y melaza (melado o azúcar) para que comience un proceso de semidescomposición. Se puede enriquecer con Semita de Arroz, Polvo de Rocas, Ceniza y carbón o carbonilla.
Es un aporte importante de Materia Orgánica, Minerales y
Microbiología.
En el proceso se producen hormonas y antibióticos que mejoran la salud de los cultivos.
Nos permite procesar grandes volúmenes de desechos de la
chacra en pocos días.