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El conflicto en la película "Ahí está el detalle" se centra en una serie de malentendidos en los que el personaje de Cantinflas se ve envuelto. Todo comienza cuando él llega a la casa de una mujer adinerada, Dolores del Paso, con la intención de matar a un perro rabioso llamado Bobby. Sin embargo, debido a su forma de hablar y las confusiones que genera, Dolores lo confunde con su cuñado perdido, quien tiene derecho a una gran herencia.
Este malentendido lleva a Cantinflas a involucrarse en una complicada trama que incluye un juicio en el que se debate su verdadera identidad. A lo largo de la película, Cantinflas intenta beneficiarse de la situación sin entender completamente lo que está sucediendo, lo que provoca una cadena de eventos cómicos y absurdos.
El conflicto principal es, por tanto, la confusión de identidades y la lucha de Cantinflas por sacar provecho de la situación mientras trata de escapar de los problemas legales y sociales que surgen debido a sus acciones y palabras enredadas. Este conflicto también sirve para criticar las diferencias de clase y la burocracia de la época, temas recurrentes en las películas de Cantinflas.