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Edmundo González Urrutia llegó hoy por sorpresa a Madrid en un exilio forzado: el chavismo sólo le dejó dos opciones tras su incontestable victoria electoral: o la cárcel o el exilio. Y a sus 75 años, eligió la segunda.
Antes de comenzar en análisis informativo de este nuevo escenario, quiero compartir con ustedes tres observaciones:
La primera: no podemos pedirle a un hombre de 75 años con una salud que no es de hierro que se inmole en una cárcel. Ya sabemos lo que enfrentamos: no estamos ante una democracia imperfecta o una democracia que no nos gusta: estamos ante una dictadura
Segunda: El estado de ánimo. Tenemos que hablar con la realidad y no con lo que nos gustaría que fuese real. No es una buena noticia. No estamos mejor y es obvio que la dictadura gana con Edmundo González en el exilio porque desactiva al candidato ganador. Dicho esto, tampoco es el final. Era un escenario previsible. Y no supone una derrota. La verdadera líder es María Corina Machado. Y Edmundo, admitámoslo de una vez, es un candidato tapa, una opción sustitutoria que jamás hubiese ganado las elecciones sin el apoyo de María Corina.
Tercera: Esta es una lucha de largo aliento. No es un sprint. No son 100 metros planos, sino una maratón.
Ahora sí: comencemos. Cómo llegamos hasta aquí. Llegamos hasta aquí porque Estados Unidos y Europa presionaron y convencieron a la oposición para que celebrase unas primarias para medirse contra el régimen. Decían ellos, el departamento de estado, la administración Biden, Borrell y Zapatero, España, pero también Francia, Alemania, y el resto de la Unión y toda América Latina : todos nos dijeron que la Unión que la crisis política venezolana tenía que resolverse en las urnas.
Y convencieron a la oposición y a los partidos políticos. Y cual es el resultado: que ahor ael candidato que ganó las elecciones con la mayor victoria jamás vista en el país tiene que ir al exilio mientras el candidato perdedor asesina, persigue y encarcela a la disidencia ante la mirada tibia de Europa. Y que dice España, que es un héroe, que bienvenido, pero que no lo reconoce como presidente.
Amigos: estamos o no estamos solos frente al peor enemigo de nuestra historia, frente a un régimen que ha destruido el país y que ha echado, casa por casa, a millones de venezolanos que vieron como sus familias se destrozaban por la migración masiva.
El resto del análisis, lo podrán ver detallado en este video.