Extremadura es Extremadura y Andalucía es Andalucía. El flamenqueo nunca tuvo cabida en la bajada de la Virgen de la Montaña. No hay que avergonzarse de ser extremeños ni se debe imitar a los andaluces en todo. Se están cargando la bajada de la Virgen de la Montaña con este despliegue de flamenqueo propio de otras tierras.