Qué difícil es conseguir una entrevista con El Gran Gato. Tenía mis tiempos de no verlo. No entiendo por qué razón n se ha vuelto tan esquivo desde su retiro. Entiendo el tema familiar y todo eso, pero no puedes olvidarte así de tu fanaticada. Yo seguí su carrera desde 1994, cuando ya tenía buen uso de razón para entender el béisbol con conciencia. Dios lo bendiga siempre.