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Los lobos están tranquilos en la Isla, ya pasó la etapa más convulsionada que es la reporoductiva, que se da entre el verano y la primavera. “Ahora están las crias chiquitas, que tienen algunos meses de vida, los machos ya están libres y salen de caza y vuelven a descansar, mientras que las hembras hacen sus salidas pero vuelven a amamantar”, cuenta Diana Szteren, investigadora y bióloga de la Facultad de Ciencias especializada en lobos marinos.
La especialista señala que lo interesante de Uruguay es que se observa cómo conviven los lobos el fino sudamericano o lobo de dos pelos (Arctophoca australis) y el lobo de un pelo o león marino sudamericano (Otaria flavescens).
En conversación con El País, Szteren remarca que cuando las embarcaciones se acercan a la isla pueden divisar la pobración de lobo fino, el que es menos común ver en los puertos porque usualmente se alimenta n aguas adentro y no son los que suelen interactuar con los pescadores.
“Lo que vemos cerca de la costa de la isla en el agua, en general son juveniles que están como jugando”, agrega y explica que el comportamiento de juego propios de la edad, que va de los dos a los cinco años para que sean considerados juveniles.