Un día el chico decidió, su verdad al fin revelar. No pudo más mantenerlo escondido, y su madre comenzó a llorar. "Oh, mi padre, ¿por qué no hablas conmigo ya? Oh, mi madre, ¿aún lloras antes de dormir? ¿Sigues orgullosa de tu pequeño así?" No temas más, no hay necesidad de ocultar. El chico, rechazado, se vio, por aquellos que amaba de verdad. No era lo que esperaban, ¿quién lo diría?, pero su secreto ya no podía ocultar más. Lejos de casa, esperando está, junto al teléfono que no suena jamás. Un mundo nuevo, él descubrirá, y sin ayuda alguna, avanzará. ¿Sigues orgullosa de tu pequeño así? No temas más, no hay necesidad de ocultar, no. No temas más, el amor sanará tu ala rota. El tiempo pasará y sanará, aprende a ser valiente, no lo olvides jamás. "Oh, mi padre, ¿por qué no hablas conmigo ya? Oh, mi madre, ¿aún lloras antes de dormir? ¿Sigues orgullosa de tu pequeño así?" No temas más, no hay necesidad de ocultar, no. No temas más, el amor sanará tu ala rota. El tiempo pasará y sanará, aprende a ser valiente, no lo olvides jamás.