Ya sé que te escondes tras las cortinas escuchando mis versos, querida, tan solo con un camisón. Con el cuerpo tembloroso y las lágrimas cayendo debo contarte con dolor, querida, nuestra tragedia. Mi padre ha visitado hoy a tu hermano para acordar mi boda, querida, con una dote de seis cerdos Yo he de cumplir lo mandado unida a tu casa querida, convertida en tu cuñada (Narrador) El 1 de marzo de 1800 ocurrió un suicidio: el de Maite y Kattalin.