Educando para quitar el Bullying. La comunidad educativa tiene deficiencias abismales en la gestión de los límites. Los menores acosadores son reforzados por los centros educativos para tapar la invigilancia y falta de prevención de la que son responsables. Las víctimas tienen que cambiar de centros escolares y hacer terapia por largo tiempo para salvar o reconstruir sus vidas. La violencia se ejerce si los adultos lo permiten. Hoy los menores están desamparados. Abandonados a su suerte.