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La multinacional bananera Chiquita Brands en marzo de 2007 reconoció haber financiado a grupos paramilitares colombianos que torturaron y masacraron miles de personas en Urabá, Antioquia. Los altos directivos de esa multinacional aceptaron haber dado 1,6 millones de dólares durante siete años a la convivir Papagayo fachada del paramilitarismo, entre 1999 y 2007. La multinacional fue multada a pagar 25 millones de dólares por este hecho, ¿Qué pasó con ese dinero? ¿Cómo están las víctimas hoy? ¿Qué pasó con los directivos de Chiquita Brands y la posible extradición a Colombia? Vea esto y mucho más en CONTRAVÍA.