Los reyes de la basura (largo)

Como Margarita , se estima que cada día 5000 clasificadores recorren las calles de los centros urbanos de Uruguay en busca de basura. Para vivir clasifican y venden envases a intermediarios y empresas recicladoras.
Como Margarita, muchos heredaron este oficio de sus padres.
Heredaron trabajar en la informalidad. 7 días de trabajo semanales. Sin derechos ni obligaciones.
Entrevista Desarrollo social
"No tienen jubilación, no tienen lo que nos protege a los que estamos en trabajos formales. Es gente estigmatizada por la sociedad".
Hoy en día, los clasificadores informales son uno de los colectivos mas desfavorecido de Uruguay.
A pesar de que algunos desean seguir trabajando de forma informal, muchos sueñan con formalizar su trabajo. Poder tener días de descanso, acceder a tratamientos sanitarios y poder dar a sus hijos una mejor educación.
Hace casi diez años, el gobierno de Uruguay decidió ponerse manos a la obra para dignificar el oficio de clasificador.
En 2004, se aprueba la ley de envases no retornables. La reglamentación establece que las empresas que pongan en circulacion envases no retornables para comercializar sus productos deben hacerse responsables de su impacto ambiental. Se les exige contar con un Plan de Gestión de Residuos de Envases que fomente la protección del medio ambiente y la inclusión social de clasificadores informales.
La iniciativa Pobreza y Ambiente del Programa de Naciones Unidas para el Desarrollo y del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, PEI, financió estudios que ayudaron a entender mejor al colectivo clasificador. Cuantos clasificadores había, como eran, y donde vivían.
Canelones, Flores, Maldonado, Rivera y Rocha son los primeros departamentos donde se pusieron en marcha los nuevos modelos de gestión de residuos urbanos. Se formaron grupos de clasificadores que empezaron a trabajar acompañados por una Organización de la Sociedad Civil. Las intendencias departamentales, la cámara de industria, el MIDES y la DINAMA les brindan apoyo técnico, material y financiero. La cámara de industria financia los sueldos y el equipo de los clasificadores, las intendencias departamentales y la DINAMA se encargan de la logística y de supervisar que todo funcione adecuadamente y el MIDES lleva a cabo el acompañamiento social
La organización de la sociedad civil acompaña a los clasificadores en su día a día en la puesta en marcha de circuitos limpios de recolección, reciclaje y venta de envases. Los capacita en gestión, derechos laborales, seguridad social, seguridad laboral y hasta comunicación intragrupal o derechos sexuales y reproductivos.
Además, se les forma en cooperativismo para que cuando el grupo se encuentre consolidado se puedan constituir en cooperativa social o de trabajo y vender su servicios.
El PEI financió un plan de negocio sobre como mejorar la cifra de negocios de los grupos y como ser sostenibles financieramente.
Margarita tiene 51 años. Después de una vida como clasificadora en la informalidad, decidió hace cinco años incorporarse a la cooperativa Ave Phenix en Canelones.
En el departamento de Flores, Juan Francisco Bonilla, Maria, y Clotilde nos cuentan como mejoraron sus vidas desde que entraron a formar parte del grupo de clasificadores que trabajan en circuito limpio.
La ciudadanía es educada para separar los residuos urbanos en su hogar, el tradicional carro de caballo es sustituido, los clasificadores pasan puerta a puerta a recoger los envases y las intendencias apoyan para el traslado del material a centro de acopios.
Se realizan actividades para involucrar y educar a la ciudadanía de las localidades sobre el valor de la figura del clasificador o la necesidad de reciclar.
Aunque persisten retos, los circuitos limpios han permitido acabar con la clasificación de residuos en los hogares, el trabajo infantil, dignificar el trabajo del clasificador y mejorar las condiciones ambientales del barrio y de las localidades.
El PEI trabajó para establecer mecanismos institucionales necesarios para la promoción de inversión sostenible en Uruguay. Con este propósito, incorporó personal con perfiles ambientales y sociales a la Oficina de Planificación e inversión.
El trabajo realizado por Uruguay en políticas públicas que articulan el combate contra la pobreza con la defensa del medio ambiente se merece atención internacional. La colaboración generada por la ley de envases entre gobiernos locales, sector privado, ministerio de vivienda, ordenamiento territorial y medio ambiente y ministerio de desarrollo social es una sinergia ejemplar para alcanzar un desarrollo humano verdaderamente sostenible.