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En su tradicional mensaje navideño, Monseñor José Armando Álvarez Cano, Obispo de Tampico, hizo un llamado a los fieles a renovar el amor divino en esta época de Navidad, destacando el verdadero sentido de esta festividad: el amor infinito de Dios hacia la humanidad.
“El Verbo se hizo carne y habitó entre nosotros”, inició Monseñor Álvarez, citando las palabras del Evangelio de San Juan, y enfatizando la importancia de abrir los corazones para recibir a Jesús. El obispo recordó que la Navidad no es solo una celebración de carácter material, sino un recordatorio de la entrega incondicional de Dios al enviar a su Hijo al mundo. "Tanto amó Dios al mundo, que le envió a su propio Hijo, para que todo el que crea en Él no perezca, sino que tenga vida eterna", expresó.