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Vila Real de Santo Antonio es un concelho portugués situado junto al Guadiana, casi en su desembocadura, río que hace frontera con España en la provincia de Huelva, y más concretamente en el término de Ayamonte.
Entre los paisajes que posee el término municipal de Vila Real de Santo Antonio no pueden faltar sus extensísimas playas. Ha llegado el momento de dar un paseo por parte de los paisajes costeros de este concelho del Algarve.
Comenzamos nuestro viaje por la zona del vivero forestal de Monte Gordo, cerca de su núcleo urbano. Apreciamos las dunas de arenas bajas que respaldan las playas y nos vamos a ir adentrando en el gran pinar situado a poniente de Monte Gordo. Inmerso en este bello espacio conífero observamos la blanca figura del poblado de Aldeia Nova, y junto a él, un curioso lago, la laguna de Aldeia Nova, con todas sus orillas repletas de juncos; en el centro de la laguna se encuentra una isleta cargada de vegetación.
En medio del pinar apreciamos varias pasarelas de madera que dan acceso a las playas de esta zona: la playa de Aldeia Nova (playa de Adán y Eva), Praia do Cabeço, etc., con algún punto de restauración, de aparcamientos y como no, sombrillas y hamacas en la playa. Algo más alejado por poniente se aprecia la silueta del complejo de Praia Verde.
Vamos a pasear por la playa realizando un amplio recorrido por estas fantásticas playas, con un inmenso arenal fino y dorado, todo un espectáculo para el órgano de la vista. Sin duda, una preciosa estampa con las azules aguas atlánticas, el dorado del arenal y el verde bosque de coníferas.
Avanzamos hacia levante, hacia Monte Gordo. Ubicado a 3 km de Vila Real de Santo Antonio, este pueblo es una de las freguesías (aldeas o pedanías) de este municipio.
Monte Gordo es un pequeño pueblo de pescadores situado entre el vasto pinar y el mar que se ha convertido en un interesante centro turístico, que actualmente cuenta con una de las ofertas hoteleras más importantes del Algarve, además de un lugar de ocio (cuenta con un casino) y da cobijo a un gran número de bares y restaurantes donde degustar la gastronomía del Algarve, rica en pescados y mariscos.
Todo lo comentado lo podemos apreciar en las imágenes, por la fisonomía de sus edificios, por la actividad pesquera que percibimos en la multitud de barquitas de pesca en la playa, acompañadas de infinidad de gaviotas a las que no les van a faltar algunos trozos de pescado, y por la cantidad de sombrillas y hamacas situadas en su extensísima playa, todo un ejemplo de convivencia entre lo tradicional y lo contemporáneo.
En las imágenes podemos observar detrás de Monte Gordo una zona de marismas. Éstas están asociadas, a través del estero de Carrasqueira, que desemboca en el río Guadiana, a la Reserva Natural do Sapal de Castro Marim e Vila Real de Santo Antonio.
La larga playa, hacia levante, acaba en el dique portugués que se encuentra en la desembocadura del Guadiana. Hacia poniente, la playa es infinita…
Con algo de prisa, aceleramos nuestro paseo, pero en el trayecto tenemos la oportunidad de contemplar un océano muy relajado que lanza suaves olas, casi imperceptibles, cargadas de nacáreas espumas.
Ya a más velocidad, realizamos un raudo recorrido por toda la zona descrita.
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