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Nació en Cesárea de Filipo en Palestina posiblemente en la penúltima década del siglo III del cristianismo entre los años 281 a 287 de la era actual.
El ambiente hostil de aquel entonces, estaba marcado por la persecución y sacrificio contra los cristianos para obligarlos a retractarse de su fe. Por eso la joven Fortunata, luego de muchos suplicios, lamentablemente fue degollada un 14 de Octubre entre los años 298 a 302, por el emperador Diocleciano cuando tenia solamente 17 años de edad, la misma suerte corrieron sus hermanos Carponio, Evaristo y Prisciano, en manos del inhumano emperador. Sus restos fueron recogidos por los cristianos para luego enviarlos a Nápoles en Italia, siendo posteriormente trasladados a Roma para ser sepultada en las Catacumbas del cementerio de Calepodio, donde quince siglos después fuera exhumada junto con un vaso de cristal que contenía su sangre.
El 5 de Enero de 1973, Marco Antonio, Vicario General de su Santidad el Papa Pío VI y Santiago Cardenal Secretario, custodio del cuerpo, autorizaban retener, donar o enviar fuera de Roma el sagrado cuerpo para la veneración por sus fieles en cualquier iglesia, oratorio o capilla. Contando con tal autorización, don Laime Siverine, Canónigo de la Iglesia de San Marcos, a cargo del cuidado de las sagradas reliquias, lo donó al Padre Fray Tadeo Ocampo, Prefecto y Comisario del Colegio de Menores Franciscanos de Propaganda FIDE de Moquegua, que por el año 1796 se encontraba en Roma haciendo gestiones al cargo que ocupaba.
Con 23 misioneros, Fray Tadeo Ocampo partió del puerto español de Cádiz el 18 de Octubre de 1796 en la fragata mercante “Nuestra Señora de la Soledad”, el viaje fue toda una odisea, pasaron miles de peripecias, sufrimientos, actos delincuenciales increíbles, hasta que a los dos años de su partida, ingresaron a Moquegua el 8 de Octubre de 1798, por “El Portillo”, en donde se levantó un arco de flores y se alfombró la calle principal para el paso de la Santa que era conducida en hombros por damas moqueguanas y seguidamente fue expuesta durante 24 horas en la Iglesia Matriz, luego se trasladó a la iglesia de San Francisco donde fue objeto de veneración por parte del pueblo durante ocho días.
El 12 del mismo mes y año fue autenticado el cuerpo de la santa por el cura Párroco de Moquegua Lorenzo Vizcarra Hurtado de Mendoza y es así que en el mes de Octubre se celebra la fiesta de nuestra querida Santa Fortunata.
SANTA FORTUNATA
Declarada patrimonio cultural de la nación
mediante resolución Directoral N° 574-INC, publicada el 18 de Marzo del 2010.
VIDEO Y EDICIÓN: Giancarlo Alcázar Badoino
GERCETUR MOQUEGUA