Yadier, es la primera vez que te escribo, pero recuerdo cómo ahora mismo cuando debutaste como catcher con San Luis. Desde ese instante he estado pendiente de tu gran carrera, sin negar que veces me molestaba cuando perdíamos de Puerto Rico, debido en muchas ocasiones a tu sapiencia. Cuando viniste a dirigir a nuestro equipo de las Águilas Cibaeñas, mi admiration por ti creció, pues sin tener tú la necesidad económica viniste para aceptar un nuevo reto que auguraba más fracasos que éxitos. Hoy los aguiluchos nos sentimos orgullosos de tenerte como nuestro dirigente sin importar los resultados de las dos etapas que se avecinan. Todos los aguiluchos te deseamos unas felices Navidades y que el próximo año estes dirigiendo en la MLB. Tu te has ganado en corazón de la ciudad “corazón” y de todos los cibaeños.