Muchos porteros se aprovechan de su superioridad física para ejercer el gorileo por ahí, muchos vigilantes se excedían de sus funciones ( ahora ya no tanto) creyéndose Harry the dirty y presumiendo de ser agentes de la autoridad cuando nunca ha sido así ( Por lo menos en España) Cuando a uno de ellos fue entrevistado en la cárcel empleaba un lenguaje barriobajero y tabernario hacia el chaval que había matado, no pueden haber vigilantes así, espero que Can Brians le haya servido para relajarse.