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Bajo un tiempo que sigue siendo absolutamente perfecto para pedalear, se presenta por delante otra larga etapa, con el objetivo de llegar cuanto más lejos mejor para poder alcanzar Oporto el lunes.
El pedaleo comienza a las 8 de la mañana, con una fuerte subida durante los primeros 11 kms para luego convertirse en algo rompepiernas donde domina en mas del 80% el asfalto. Alvaiázere, Ansiao, la majestuosa Coimbra, y finalmente Mealhada tras cruzar una innumerable cantidad de pequeñas poblaciones.
Pero sin dudarlo, el punto más destacable de toda la jornada y probablemente de lo que mas recuerde en el futuro, desde el punto de vista humano, tuvo lugar al llegar al Refugio de Nikolau, después de atravesar Zambujal. Un refugio espiritual de paz y hospitalidad donde confluye la autentica esencia del Camino de Santiago. Junto con el refugio de Manjarín en el camino francés, mis lugares preferidos de ambos recorridos.