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Que en el norte de la península ibérica hay bisontes, es un hecho bien contrastado, y de ello nos han dejado buen recurso aquellos habitantes de hace miles de años que habitaron en las cuevas.
Su desaparición, es casi seguro que también ha sido causa de los hombres, primero por su persecución con lanzas y trampas, aunque posiblemente no fuera ni mucho menos esto el motivo de extinción, si no más bien la persecución en eras más cercanas a la actual.
En todo caso, el bisonte siempre ha sido una expectativa biológica presente en la sociedad actual gracias a los yacimientos prehistóricos. Y hablando de prehistoria, qué mejor que recrearla no solamente con unas pinturas si no también con las especies al natural.
A Teverga, al Parque de la Prehistoria, acaban de llegar los dos primeros bisontes que complementarán el equipamiento turístico creado con las reproducciones de las mejores cuevas del norte ibérico que contienen pinturas rupestres.
El proyecto, que nace de la colaboración del FAPAS con la Asociación para la Conservación del Bisonte Europeo, se consolida con el apoyo de la empresa institucional RECREA y el Ayuntamiento de Teverga.