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Comentario a la exposición:
El encuentro con Juan Andrés Cardozo (1942) fue muy interesante y enriquecedor. Aquí planteamos algunas reflexiones surgidas a partir de sus ideas. El autor sostuvo que su libro (Estar y Ser, Autorreflexión filosófica) es una invitación a la auto-reflexión sobre la problemática del Estar y el Ser. El “estar” alude a una “presencia”, y como problemática se remite a los antiguos griegos (Heráclito y Parménides), en el sentido de una dualidad entre ser y no ser, que podemos plantear como “presencia” y “ausencia”.). También sostuvo que el simple “estar” no es suficiente, es necesario pensar para orientarse hacia lo Absoluto (que desde Hegel se asocia con la Historia), en busca de la libertad, en tal sentido se da un desplazamiento del simple “estar” hacia el “ser”, o más específicamente hacia el “poder ser”. La libertad (que implica el “poder ser”), a su vez, es apertura hacia la igualdad y la justicia.
El mero “estar” (la presencia) supone su propia superación, a través de un “reconocimiento” que se da en medio de la sociedad. Aquí nos introducimos ya a la cuestión del “ser”, porque el ser implica realización y re-conocimiento. Pero de manera más específica el mero “estar” se supera a través del “hacer” y del “pensar”. El pensar permite conocer y comprender la realidad, y en tal sentido permite a su vez ubicarse frente al “estar”.
“El pensar es el camino del ser”, dice Cardozo, un “pensar” que al hacerse crítico cultiva los valores de la libertad, la igualdad y la justicia, y con ello, al conjugarse con el “hacer”, llevar hacia la búsqueda de la transformación de la sociedad (podemos recordar que en otra de sus ponencias Cardozo afirmó que “Sólo hacemos filosofía para transformar al mundo”).
En tal sentido existe una “necesidad de la filosofía”, o en otras palabras una “necesidad del pensar”, y más todavía, un pensar crítico, porque vivimos en un mundo en el que predomina una racionalidad meramente instrumental, que termina propiciando la alienación en el hombre.
En la parte final de su exposición, siguiendo lineamientos propios de la filosofía de la liberación latinoamericana (aunque también lo podemos relacionar con ideas de Habermas o Sartre), Cardozo planteó la necesidad de instituir un pensar orientado hacia la descolonización del pensamiento, de modo a contextualizar de forma más precisa su planteamiento sobre paso del mero “estar” hacia el “ser”.