Рет қаралды 116,120
Una mañana, una mujer se paró frente a un hombre sin hogar, el primer pensamiento del hombre fue que seguramente la mujer solo quería burlarse de él, como ya lo habían hecho tantas veces otras personas, pues era evidente por su ropa de marca y su aspecto pulcro que estaba acostumbrada a tener todo lo que quería y que nunca en su vida se había perdido de una comida. El hombre le gruñó:
- Por favor, déjeme en paz.
La mujer no se movió, le dirigió una sonrisa deslumbrante y le preguntó:
- ¿Tienes hambre?
El hombre rio y le respondió con sarcasmo:
- No, justamente vengo de cenar con el presidente. Ahora váyase.
La mujer seguía sonriendo con cariño y para sorpresa del hombre intentó ponerlo de pie, el hombre exclamó enojado:
- ¿Qué está haciendo? ¡Ya le dije que me deje en paz!
Un policía se acercó al escuchar los gritos del hombre y preguntó si había algún problema, la mujer le explicó que solo estaba tratando de ponerlo de pie y le pidió ayuda al oficial.
- ¿Qué quiere hacer con él? Preguntó confundido el policía.
La mujer respondió señalando una cafetería sonriente:
- Lo llevaré a esa cafetería, le daré comida y podrá refugiarse del frio por un rato.
El hombre se resistía indignado y entonces el policía le dijo que aprovechara la oportunidad, la mujer solo quería ser amable con él, y así, la mujer y el oficial pudieron convencer al hombre. Cuando el hombre ya estaba sentado ante una, la mujer preguntó:
- ¿No te acuerdas de mí?
El hombre examinó su rostro, intentando recordar y dijo:
- Se me hace familiar.
La mujer le explicó con cariño:
- Hace muchos años, cuando tú trabajabas aquí, vine con hambre y frio. Acababa de graduarme de la universidad en mi pueblo, vine a la ciudad en busca de trabajo, pero no pude encontrar nada, se me acabaron los pocos ahorros que tenía y me corrieron del apartamento. Caminaba con hambre y frio, buscando un lugar donde pudieran ayudarme con algo de comida y llegue aquí.
Entonces el hombre dijo:
- Ya recuerdo, te acercaste al mostrador y me preguntaste si podía darte algo de comer a cambio de trabajo, pero te dije que estaba en contra de las políticas de la empresa.
La mujer lo interrumpió y le dijo:
- Pero entonces tú me hiciste el sándwich de carne más grande que había visto en mi vida y una taza de café, me preocupé por ti, tenia miedo de que te metieras en problemas, pero entonces me di cuenta que ponías de tu dinero en la caja registradora y comí tranquila, sabiendo que todo iba a estar bien. Ese mismo día encontré trabajo y por años trabajé duro y con la ayuda de Dios pude tener mi propia empresa.
La mujer, profundamente agradecida, le pidió que fuera a su empresa al día siguiente, pues le ayudaría ofreciéndole un empleo y el hombre, conmovido dijo:
- ¿Cómo podré agradecerte?
- No me des las gracias, no sé qué habría sido de mí sin tu ayuda ese día. Agradece a Dios, por haberme traído a ti.
La mujer y el policía se despidieron del hombre, para que comiera tranquilo y como despedida la mujer le dijo al oficial:
- Gracias por su ayuda, oficial.
Y este le dijo:
- Al contrario, gracias a usted porque el día de hoy jamás lo olvidaré, hoy presencie un milagro.
Narración: Liliana Gonzalez
En este canal encontraras hermosas reflexiones para la vida, reflexiones sobre Dios, oraciones, vídeos inspiradores y motivadores. Mira nuestros otros vídeos y suscribete a nuestro canal, eso nos ayudaría a seguir adelante. Muchas gracias.
Música:
Kevin MacLeod (incompetech.com)
Licensed under Creative Commons: By Attribution 3.0
creativecommons...
#Reflexiones