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🔷 El Venturi 400GT sigue siendo incluso a día de hoy, uno de los coches más rápidos jamás diseñados y fabricados en Francia. Es más, cuando se lanzó al mercado en 1992, nacería con el deportivo francés más rápido y con más potencia de la historia. Para otorgarle aún más estatus de leyenda, sería el primer modelo del mundo que equipaba frenos de carbono de fábrica. Los trazos del precioso biplaza 400 GT habían salido del estudio de Gerard Godfroy, en este caso para competir directamente con el formidable Lotus Esprit o el Ferrari 348, y lo haría, eso sí, tomando ciertas influencias de leyendas como el BMW M1.
🔶 Venturi se fundaría originalmente como marca en 1984. Los ingenieros franceses Clud Pagud y Gérard Godfroy, que entonces formaban en las líneas de Uliez, ambicionaban retomar los tiempos gloriosos de los GT franceses. Lo pesos pesados galos que un día conquistaron los más elitistas garajes y a su vez, los autódromos más célebres del viejo continente. Bugatti, Fasel Vega, Monica o Ligier, eran aquellos antepasados que habían encendido esta llama de inspiración.
🔷 La herencia de estos GT de Venturi se remonta al Salón del Automóvil de París, donde haría presencia el primer producto de la firma, que aunque presumía de una estilizada carrocería coupé, escondía un lado antagonista portando una suspensión McPherson del Peugeot 205 y un motor de escasa potencia procedente del VW Golf GTi que se alojaba en la parte trasera. Tras provocar una extraña confusión y una crítica indeterminada entre la prensa de la época, Hervé Boulon que se convertiría en uno de los primeros directores ejecutivos de la marca, logró reunir los fondos suficientes para forjar MVS o Manufacture de Voatiug de Sport, una empresa que en esta historia podríamos catalogarla como la precuela de Venturi.