Señoras, me inclino frente a ustedes y toda su sabiduría. Qué fácil le queda a algunas personas darle poco valor al trabajo artesanal sin conocer de primera mano todo lo que implica un tejido hecho a mano. Larga vida y salud para las mujeres, los hombres y los niños que preservan sus saberes ancestrales. Saludos desde Cali.