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Aquí les comparto la receta de mi postre favorito desde la infancia.
Los huevos a la nieve o Islas flotantes es un postre que sí o sí hacían nuestras abuelitas en casa, por eso suele traer muchos recuerdos para los que lo prueban.
Es fresco, y rico, perfecto para prepararlo y disfrutarlo en familia.
Les dejo la receta completa aquí:
INGREDIENTES
PARA LA CREMA DE VAINILLA:
2 y 1/2 tazas de leche evaporada pura
8 yemas de huevo de corral a temperatura ambiente
1 taza de azúcar blanca
1 y 1/2 cucharadita de esencia de vainilla
PARA EL MERENGUE:
2/3 de taza de claras de huevo a temperatura ambiente
1 taza de azúcar blanca
1/2 cucharadita de crémor tártaro
PARA EL CARAMELO:
3/4 de azúcar blanca
1/4 taza de agua
PREPARACIÓN
En una olla de fondo grueso, batir el azúcar con las yemas, echarle la leche, la esencia de vainilla y darle un hervor, siempre batiendo con batidor de alambre.
Retirarlo del fuego y poner la olla sobre agua con hielos, de manera que se corte la cocción.
Una vez fría ponerla en la dulcera donde la servirán y refrigerar por lo menos 4 horas o toda la noche.
Para el merengue, echar las claras y el azúcar en un tazón de metal y ponerlas en baño maría hasta que quemen. Luego batirlas en la batidora, y así el vapor que es agua se eliminará hasta lograr un merengue sólido, que luego no va a llorar.
Agregar el crémor tártaro y batir hasta que el merengue quede sólido y brilloso.
En el agua del baño maría que quedó de las claras, en fuego bajo cocinar las claras del merengue dándoles forma ovalada con dos cucharas grandes, vuelta y vuelta, luego escurrirlas en papel toalla y colocar los merengues o “nubes” sobre la crema de yemas y con el azúcar y agua hacer un caramelo y esparcirlo encima.
Finalmente pueden decorar o espolvorear si desean con almendras laminadas tostadas.
Me cuentan qué tal les pareció y díganme si quieren que les enseñe a preparar otro postre que les traiga recuerdos de su niñez.